Apología de una muerte amorosa.
El cuerpo es el vehículo del alma. El cuerpo nos acerca a la muerte, el cuerpo siente y vive el amor. Cien, noventa y nueve, noventa y ocho, noven… ¿fin? Quedan tatuados en sus ojos la bella imagen de ese rostro que fue todo y nada para él. Esa es la verdadera anestesia que le da tranquilidad. No espera jamás despertar. Solo vive intensamente ese recuerdo incesante que lo acompañó toda su vida.
Tic tac, tic tac… abre los ojos tatuados. Un poco perplejo, va encontrando su rumbo. Sus primeras palabras son aquellas que buscan encontrar la certeza de que se está vivo, prolifera una angustiante e instintiva: ¿enfermera? Ella, con una respuesta mecánica, le abre las puertas a la nueva vida. Es un acto más que de amor, de profesionalismo, le suministra el medicamento necesario.
Se duerme. Se despierta. Se duerme. Se despierta. Entra en un círculo virtuoso propio de una actividad postoperatoria. Por el momento no ha muerto. Habría que preguntarse si se le prolongó la vida. Su enfermedad los últimos años lo ha mermado. ¿Ha vivido muriendo con más intensidad? Ay, la vida siempre llena de incertidumbres. El ser humano se volvió racional al plantear preguntas.
Ya plenamente consciente de su situación, comienza a tomar sus primeros alimentos en ¿este nuevo renacer? Esa imagen incesante que lo ha acompañado por muchos años, ese rostro bellamente genuino, lo volvió a ver en el hospital. Era real. Tan verdadero que cuando estuvo frente a ella se quedó, como era su costumbre, callado. Solo la observó y fue intensamente feliz.
Ver ese rostro fue para él un acto de redención. Pensó: “señor, puedo morir en paz”. Paradójicamente no solo despertó de una anestesia, volvió a tener la oportunidad de seguir amando a una mujer por el resto de su vida sin que ella lo sepa. Cual Dante.
su amor era la enfermera? no entendí esa parte. Pero me encantó. Sigue así.
La enfermera es solo un personaje que cumple una función específica. El rostro dela mujer que el personaje que operan es otra.
ok entiendo. Gracias.
Buen relato, qué alegría encontrar cosas bien escritas. Tienes un nuevo seguidor :)
Igualmente, estoy leyendo lo que escribes.
nunca lo había pensado de esa manera, "El cuerpo nos acerca a la muerte". Algunos por el deterioro natural de sus órganos, otros por causas más trágicas. Al final del día es el motor que te va moviendo hacia el fin de tus días.
Excelente, gracias por compartir tu arte
Y gracias a tí por leerme y comentar. LO aprecio mucho. Un abrazo.
muy bien escrito, me gustó mucho
Muchas gracias por su comentario.
¡Me ha gustado mucho tu relato, como sobre vuelas el existencialismo, lo racional de un hombre y a la vez lo irracional del amor mismo, que cuando es puro no se sujeta de ninguna lógica! ¡Buen arte! Te sigo, es bueno pasearse por tus letras.
Gracias por emprender el vuelo y pasar por el país de mis letras. Agradecido por el comentario, lo tomo muy en cuenta. Saludos.
Wao me gusto mucho, tienes talento.
Yo he escrito algunos relatos cortos también, espero y pases por mi post si lo deseas.
Perfecto, eso haré, uno aprende demasiado de las lecturas. Un saludo.