Go back to God. ||| Vuelve a Dios.
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Our Father who is in heaven allows us to go our way, we resist his plan. However, like the father in the parable of the prodigal son, He will not force us to stay with Him. If we deviate from His plan, what happens then?
And getting up, he came to his father. And when he was still far away, he saw his father, and was moved with mercy, and ran, and fell on his neck, and kissed him. 21 And the son said to him: Father, I have sinned against heaven and against you, and I am no longer worthy to be called your son. 22 But the father said to his servants: Take out the best garment, and dress him; and put a ring on his hand, and shoes on his feet. 23 And bring the fattened calf and kill it, and let us eat and celebrate; 24 because this my son was dead, and he has revived; he was lost, and he is found. And they began to rejoice.
Luke 15.20-24
Disconnection from our heavenly Father is inevitable if we cut our bond with the Father. The prodigal son's lack of connection to his father underscored how far she had drifted from him. Contact with the Father is vital to maintain a healthy communion with Him.
God gives us talents, resources and time to build his kingdom. However, our focus in our plan is wasteful: it leads to using what God gave us instead of using it for its intended purpose.
The rebellious son wasted time and money on frivolous things until he was in a worse situation than the workers in his father's house. The same applies to receiving spiritual gifts from God.
Seeking to follow paths contrary to God's will leads to unhappiness. True contentment can only be achieved through faith in Christ. Our deepest needs remain unmet.
Our heavenly Father never stops loving his children. His decisions don't have to face consequences; instead, he continues to love his children. When we turn to him, he will receive us with great joy and love. GO BACK TO HIM!
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Nuestro Padre que está en los cielos nos permite seguir nuestro camino, resistimos su plan. Sin embargo, como el padre en la parábola del hijo pródigo, Él no nos obligará a quedarnos con Él. Si nos desviamos de Su plan, ¿qué sucede entonces?
Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó. 21 Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. 22 Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. 23 Y traed el becerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta; 24 porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse.
Lucas 15.20-24
La desconexión de nuestro Padre celestial es inevitable si cortamos nuestro vínculo con el Padre. La falta de conexión del hijo pródigo con su padre subrayó cuánto se había alejado de él. El contacto con el Padre es vital para mantener una sana comunión con Él.
Dios nos da talentos, recursos y tiempo para construir su reino. Sin embargo, nuestro enfoque en nuestro plan es un desperdicio: lleva a usar lo que Dios nos dio en lugar de usarlo para el propósito previsto.
El hijo rebelde perdía tiempo y dinero en cosas frívolas hasta quedar en una situación peor que la de los trabajadores de la casa de su padre. Lo mismo se aplica a recibir dones espirituales de Dios.
Buscar seguir caminos contrarios a la voluntad de Dios conduce a la infelicidad. El verdadero contentamiento solo se puede lograr a través de la fe en Cristo. Nuestras necesidades más profundas siguen sin ser satisfechas.
Nuestro Padre celestial nunca deja de amar a sus hijos. Sus decisiones no tienen que enfrentar las consecuencias; en cambio, sigue amando a sus hijos. Cuando nos volvemos a él, nos recibirá con gran alegría y amor. VUELVE A ÉL!
Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.
