El rey inmortal
Muchos me conocen en la historia como el rey de la cabellera hermosa, aquél que unificó a toda una nación y extendió sus dominios hacia las islas británicas de Orkney. Otros me conocen como el lord protector de la Mancomunidad de Inglaterra, Escocia e Irlanda, aquél que condenó a un rey a ser ejecutado por decapitación. Otros más me conocen como el jefe de la policía secreta británica, organismo que actualmente controlo y con la que encubro los peores crímenes que los vampiros y los hombres lobo han cometido a lo largo de la historia.
Reyes patéticos me han tenido a su lado; princesas y esclavas hermosas han pasado por mis brazos; príncipes famélicos y cobardes he convertido en tiranos, títeres manipulables para el bien de la Alianza Licantrovampírica.
Sin embargo, nada de eso fue suficiente para colmar mi sed de poder.
Necesito más. Quiero más... Y no descansaré hasta satisfacerme por completo, y qué mejor manera de lograrlo que buscar el secreto de la inmortalidad.
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