El obturador se mide en tiempo y para localizarlo en nuestra cámara lo veremos en la pantalla, aparecerá un número en forma de fracción o en forma de segundo y ese será nuestro indicador del tiempo que estará abierto el obturador, lo podremos controlar haciendo variar el tiempo, si este número es mayor es decir si es un número muy alto por ejemplo un 1600 avos de segundos nuestro obturador se abrirá y cerrará muy rápido si tenemos nuestro velocidad en 1600 avos de segundo quiere decir que cogemos un segundo y lo dividimos en 1600 partes y el resultado de eso es lo que durará nuestro obturador en abrirse y cerrarse queriendo decir que capturara la foto de una forma rápida, pero si en cambio ponemos el obturador a un número bajo por ejemplo 3 segundos nuestro obturador tardará en abrirse y cerrarse 3 segundos eso quiere decir nuestro sensor estará expuesto a la luz 3 segundos.

Vemos un grifo con agua, del lado izquierdo nuestra velocidad está en 1/8 lo que quiere decir que el obturador estará más tiempo abierto teniendo como consecuencia que tardará más tiempo en capturar la imagen, en el lado derecho vemos una velocidad mucho más alta 1/350 lo que nos permite capturar el momento mucho más rápido, sin tocar el tema a grandes rasgos podemos apreciar que no solo el valor de la velocidad es modificado, aquí comenzamos a tocar el iso, a mayor velocidad la fotografía se capta más rápido lo que disminuye la luz que entra al sensor y para ello subimos el iso y con ello conseguimos que el sensor sea más sensible y capta mucha más luz.