Diario de una enferma 6: "En un viaje llega lo que el corazón necesita"

Uno de mis sueños es respirar el aire de España, caminar por las calles de Italia...para terminar en Roma, caminar junto personas de ojos rasgados mientras pasamos edificios altísimos en Asia.
Pero el viaje que estaba haciendo en ese momento de esperanza necesaria, es junto a miles de personas en una cabina sin aire acondicionado, esperando llegar rápido a la estación del hospital. Eran las 9 a.m y un montón de niños se suben junto con su profesor. No iban uniformados pero todos se parecían: pequeños, morenos y ruidosos.

—¿Saben que es el colmo del colmo?
—¿Ah?
—Que el mudo le diga al sordo que el ciego lo vió.

—Silencio, jóvenes—repetía el profesor, ahogado entre gritos.

—¡Repita!¡Repita! Tres tristes tigres tragan trigo en un trigal, en un trigal tragaban trigo tres tristes tigres.
—¿Ah?

Y así más y más la cabina se llenó de adivinanzas, chistes malos y trabalenguas que siempre contenían la letra "rr". Y sobre todo voces infantiles y escandalosas.

Yo estaba en mis sueños, escuchándolos y llorando por dentro. Sólo deseaba que los chistes malos que me hacían carcajear con los ojos cerrados me acompañaran hasta los pasillos oscuros del edificio azul que me esperaba.