Saludos mis queridos amigos, bienvenidos una vez más a mi blog.

Estoy de vuelta para mostrarles un dibujo que hice hace un par de días para un amigo (Leonardo), su historia es un poco triste, su padre falleció cuando él tenía la corta edad de 10 años, y su madre lo levantó a él y a sus 4 hijos con mucho trabajo y esfuerzo, pero no olvidando el profundo amor que sintió por su difunto esposo, por esta razón quiso darle de obsequio de cumpleaños un presente en memoria de su padre.

Cuando vino a mi pidiéndome la realización del cuadro, primero me negué jejeje, es que no poseía una foto donde se apreciara bien el rostro de su padre, pero logramos conseguir una pequeña tipo carnet con una de sus hermanas, así que sin más les muestro el dibujo del señor Ender Blanco.

Materiales Utilizados:

• Cartulina Opalina tamaño carta.
• Lápices de dibujo HB, 3B, 7B y 8B.
• Borrador.
• Difuminador.

PASO A PASO

Para comenzar, realicé el boceto inicial del dibujo, disponiendo la posición del rostro, la ubicación del rostro, nariz y boca, hasta tenerlo todo dispuesto y ubicado lo más parecido posible.

Lo primero en darle vida fue su cabello, como siempre acostumbro, comencé de arriba hacia abajo, de forma ordenada, logrando la oscuridad que buscaba y haciendo los trazos necesarios para hacer su cabello lo más real posible.

Posteriormente pasé con el sombreado del rostro, empezando con sus ojos, en este paso hice varias modificaciones ya que sentía que no lograba captar la profundidad de la mirada del señor. Luego baje con el resto, sombreando nariz, boca y mentón.

Por último afiné detalles de sombreado, detalles del cuello y ropa del señor Ender, terminando de esta forma mi dibujo, logrando un trabajo limpio y haciendo feliz a una persona especial, acreedor de todo mi cariño y afecto.

_{Foto original proporcionada por Liliana Blanco (Hija del señor Ender)}

Gracias mis queridos amigos por pasar a leerme, gracias a Dios por bendecirme con este maravilloso don. Está demás decir que tanto Leonardo como su mamá quedaron muy complacidos y contentos con el retrato del señor Ender, y yo me sentí doblemente feliz por solo saber que saqué una sonrisa sincera en ambos rostros,
y eso es lo que realmente importa.
Nos leemos en la próxima, se les quiere. BESOS