Vivir en Venezuela, donde actualmente estamos presionados, angustiados, agobiados, difícilmente, no caer en estado de ansiedad o depresión por la guerra psicológica y comunicacional a la que estamos sometidos. Ni que decir de la crisis económica y social. Máxime si sabes que aun no hay posibilidades de emigrar para librarse de tal secuestro emocional. Una de las formas para cambiar mi estado de ánimo es empleando la técnica de respiración. Inhalo profundo, mientras pienso la situación difícil y exhalo por la boca con mucha fuerza para liberar las tensiones. Cambiando así mi estado para poder tener paz en mi hogar, salir a la calle y seguir adelante luchando por una Mejor Venezuela.