Participando en su fantasía
Me encuentro atrapada en su carro, no me deja moverme, rápidamente se desabrocha el pantalón y me penetra con todas sus fuerzas, se encuentra muy dentro de mi. Tapa mi boca con su mano, mi respiración se agita con cada embestida que él me da, mientras me susurra:
--Te gusta puta, te gusta como te cojo, así siénteme, así como te gusta.
Mis ojos se cierran para disfrutar de cada embestida, sus movimientos eran rápidos y fuertes, mis piernas estaban levantadas, el busco la posición cómoda para ambos.
El estacionamiento de la torre de oficinas era el lugar perfecto, ya de noche, todo estaba completamente oscuro, pero si alguien se acercaba podía vernos, eso me hacia tener miedo, adrenalina, placer, aun no lo sé, lo que si se, es que lo disfrutaba como él lo hacia con mi cuerpo.
Mis piernas temblaban cada vez que el me penetraba, mi sexo convulsionaba, él me llena de sus fluidos y ambos quedamos exhaustos por el orgasmo. Su pene descansa dentro de mi, mientras se recupera lame como perro mis senos, los chupa, los besa, yo comienzo a arañarle la espalda y a lamerle su cuello, su oído, y en cuestiones de minutos, siento como poco a poco su pene se va poniendo duro y comienza a mover sus caderas suavemente. Jalones de Cabellos, mi boca tapada, todo su peso encima de mi, rasguños, mordiscos. El sabes como volverme loca, como tocarme, como besarme, su fantasía era hacer la escena de una violación en su carro, y yo quise participar en su fantasía. Ambos llegamos al orgasmo nuevamente, él sale de mi y me ayuda a arreglarme en el carro, me llena de sus dulces besos y me dice:
--Vamos a casa mi reina, quiero seguir jugando contigo. Pero ahora sera con el látigo.
Muy interesante