Hoy les voy a dar una breve explicación sobre cómo el peso visual de nuestras fotos va variando cada nanosegundo, por lo que mentalmente debemos estar alertas para movernos y ajustar los parámetros de la cámara. Para ello he seleccionado una serie de fotografías que realicé durante el recorrido de una ruta en San Antonio de Los Altos en #Venezuela. Este post quedó un poco extenso, pero estoy seguro que te servirá para comprender más acerca del maravilloso mundo de la fotografía.

¡Acá vamos!

Cuando realizamos fotografía de paisaje,

la composición será de relevancia para contarnos la historia o el sentimiento de la imagen que hemos capturado. Al agregar un elemento humano, las variables del peso visual como el enfoque, los colores, el contraste, las texturas, las formas, serán de mucha importancia, pero lo que le dará magia al momento será la mezcla de las mencionadas variables con la ubicación de nuestro sujeto.

Ahora bien, para ello también debemos tomar como referencia la regla de los tercios, ajustando los elementos de nuestra toma, de acuerdo a los puntos de mayor interés o colocando dentro de cada recuadro algo que llame la atención. Si practicas con frecuencia, tras varios ensayos y errores, pronto dominarás el proceso. Luego realizarás todo de forma natural e incluso robótica. Solo la práctica hace que reaccionemos en pocos segundos y tengamos la capacidad de amoldarnos al momento, lo mejor posible.

Veamos el ejemplo de esta foto que me gusta mucho

En esta primera foto vemos que la pose de los infantes es dinámica y que además ambos se ubican en la parte inferior derecha de la imagen, dejando ver, desde ese lado, la ruta completa y guiando nuestra mirada hacia la parte superior izquierda, donde observamos la cúspide de aquel camino y un poco del cielo. La imagen resume la travesía que hicimos ese día y en cada recuadro hay detalles que generan la sensación de inocencia, amistad, libertad, diversión y superación,

Ahora fíjate en esta segunda toma

Es la misma, pero tomada solo un segundo después y ese lapso bastó para que la posición que pude captar de los niños dejara de manifestar movimiento, ya que ellos empezaban a descender. En este encuadre se ven más los laterales de la ruta, pero perdí el final de ésta y ya no se ve parte del cielo. Ya no es tan potente como su antecesora, a pesar que cumple con muchas de las reglas fotográficas.

¡OJOOOO!

Para no dejar el éxito de nuestra foto en manos de la fortuna,

es vital que tomes interés por aprender sobre cada una de estas técnicas, las cuales puedes hallar en internet o en cursos presenciales, porque lo que te diré a continuación es la única variable que no podremos dominar completamente a placer: el instante preciso. Ocurre cuando todo lo que has aprendido, coincide, conspira y sucede justo como lo hemos previsto.

Tienes que crear en tu mente los posibles escenarios

o hacer una especie de predicción del futuro de ese momento que pretendes capturar. Es cierto que esto no nos garantizará que siempre podamos tomar la foto que buscamos, sin embargo, intentarlo teniendo en cuenta los detalles expuestos, te dará una gran ventaja. Pondré dos ejemplos más en los que nuevamente la primera imagen será la mejor foto.

Este es otro gran momento

En esta foto, todo está en una correcta armonía. El rostro del jovencito está ubicado en el cuadrante superior izquierdo, exactamente el punto de mayor interés. La figura que delinea su cuerpo es de movimiento. Tanto sus brazos como sus piernas son completamente visibles y eso es algo importante, luego entenderán por qué se los digo. Asimismo, la leve caída del horizonte va en sintonía con la línea que dibuja el camino, la cual finaliza de forma diagonal en la parte inferior derecha, que es justo a donde miran los ojos de niño.

Ahora mira la siguiente secuencia

Es cierto que hemos ganado detalles importantes,

pero hemos perdido algo vital, según mi modo de ver las cosas...

Como puntos favorables tenemos que el cabello tiene mucho movimiento y que los ojos miran con más intensidad el camino. Además, uno de los brazos apunta, con una rama perfectamente alineada a otro punto de interés, al final de la ruta. Como único punto negativo, el movimiento fue capturado cuando quedó oculta una parte de su pierna izquierda, haciéndolo parecer mocho de esa extremidad. Quizás no te parece malo, pero es porque tienes de referencia la primera foto. Si esta segunda fuese la única que hubieses visto, el detalle te chocaría un poco o tal vez bastante.

Tienes que comprender que

al depender de un protagonista humano, los movimientos del sujeto son erráticos, son más rápidos o lentos que nuestra cámara o que nuestra habilidad. Además, cada milisegundo que transcurre, nuestro encuadre va moviéndose a la par del sujeto, por lo que tenemos que ajustar rápidamente todas las variables que conocemos.

Cuando tu mente puede adelantarse a lo que probablemente ocurrirá,

Sucede la magia...

Te explico la intensión de las dos siguientes fotos para que comprendas que con paciencia y teniendo claro el objetivo de lo que buscas mediante tus conocimientos, realizarás mejores e increíbles fotos.

No voy a detallar todo como en los casos anteriores. Lo único que te voy a decir que en estas dos fotos consecutivas, he colocado el enfoque en diferentes puntos para crear, junto con todos los elementos dispuestos en el encuadre, una sensación y un protagonista diferente.

En la primera imagen, el enfoque está puesto en el niño

Gracias a ello se le distinguen todos los rasgos expresivos y los de su ropa, mientras que en segundo plano queda su fiel compañera de caminos. Dejo a tu interpretación el sentimiento que se manifiesta en esta composición.

En la segunda foto,

que fue la primera que compone esta secuencia, el enfoque principal recae sobre la pequeña, pero sucedió tan rapido que quedó movida ya que usaba un punto único. El encuadre lo ajusté un poco en el revelado para transmitir cansancio y apuro.

Por último,

dejo por acá la foto de un ciclista que ese mismo día realizaba esta ruta y al que esperé detenido para tomarle una foto. Finalmente, luego de una ráfaga de varias fotos, ésta fue la que quedó