El enigma de Baphomet (88)

in #spanish6 years ago

28
Até el caballo tapando la puerta de la cabaña. Algún lobo podría visitarme durante el sueño.

Captura de pantalla 2017-09-14 a las 20.13.12.png Nadie había entrado desde que la ocupamos los cinco, Matalobos, Cerecinos, Rechivaldo, Roderico y yo, aquella noche desgraciada en que desapareció Rechivaldo. Me tapé con los helechos y no quería pensar en nada porque el tormento era insoportable. Estaba tan cansado que me dormí profundamente con el arrullo de la ventisca hasta que me despertó Áureo con un pertinaz relincho de peligro.

Captura de pantalla 2017-10-29 a las 10.43.59.pngAlgo había visto. Al salir fuera me encontré con el lucero matutino. Brillaba inmenso y dominaba el orbe. Desde el monte de enfrente se podía tocar con las manos; no distaba más de una vara de la línea que unía el cielo y la montaña. Amanecía. No me había percatado de que, a mi lado, a pocos pasos de distancia, delante del caballo, una loba inmóvil estaba observándome con un cordero entre sus fauces. Cuando la fiera advirtió que la miraba fijamente, con una maña asombrosa, como si el animal muerto fuera una capa con la que se embozara la cara, lo cargó sobre el lomo, sin soltar los colmillos de las patas traseras, y se marchó, con trote pausado y meneando la cola, a llevar el alimento a su camada.
Los lobos nunca matan a un cordero solamente. Suelen matar a todo el rebaño por no sé qué instinto criminal que llevan dentro, aunque sólo necesiten uno para asegurar el sustento cotidiano.
Cuando ya se veía, seguí una gota de sangre que, a intervalos cada vez más cortos, me llevaría al redil de donde había venido la loba.
Monté el caballo y seguí la estela por el sendero valle abajo. Algunas veces tuve que bajarme del caballo y rebuscar entre el forraje la gota perdida hasta que, a lo lejos, divisé un corral con las tapias de piedra en medio de un prado de la ladera del monte. No había rebaño. Solamente dos ovejas y dos corderos recién matados a mordiscos. Los cargué sobre Áureo y, antes de que subiera el pastor a hacer el recuento, me dirigí a lo más alto del pico donde quedaban todavía unos restos de neveros que no se deshielan nunca en la cara norte de la cordillera. No sabía cuanto tiempo iba a permanecer en aquellos montes. Tardé un buen rato antes de ocultarlos en la nieve helada y cubrirla con piedras, porque no me fiaba de que la loba, con su olfato finísimo, se dirigiera a lo que había sido fruto de su trabajo rebuscando por las crestas.
Volví a la cabaña, preparé fuego y asé una pata aliñada con tomillo y una ensalada de acederas. Ya tenía asegurada una buena reserva de carne, por si acaso. Sólo me faltaba una bota de vino para animarme.
Poco antes de medio día, bajé por el valle del Silencio hasta llegar al molino a media tarde. El camino es el más tortuoso y arriesgado porque suelen refugiarse osos en las espesuras, pero más seguro de que no me encontraría con campesinos; en ese valle no hay ninguna tierra cultivable, sólo pájaros y alguna que otra alimaña. Ningún percance me sorprendió en la bajada. Até a Áureo en lugar seguro y seguí a pie hasta el molino.
Salté la tapia

Captura de pantalla 2017-10-29 a las 10.47.49.png por el mismo sitio por el que había salido y, atravesando la huerta, escuché el lamento de Gelvira envuelto en el ruido del molino. La puerta de atrás estaba cerrada por dentro con el tranco. El molinero daba voces enfurecido. Agucé el oído porque se confundían con el lamento y la carraca del molino. Le estaba llamando los mayores insultos y concluía:
—¡No te soltaré hasta que no me digas quién estuvo aquí contigo! El sayón de San Esteban me ha dicho que las huellas del criminal salían del molino.
Cesó el lamento y un grito desgarrador y prolongado la dejó afónica. El molinero gritaba más fuerte:
—¡Dime quién ha sido!
—“¿¡La estará castigando con torturas!?” —me pregunté.
Bajo tortura, tanto que sea sobre el cuerpo como sobre el entendimiento, puede uno hasta autoinculparse de los mayores crímenes como tantos templarios habían hecho desconcertados por el terror ante las máquinas diabólicas y la hoguera, aun a sabiendas de que no iban a ser libertados. La tortura aplasta el pensamiento y se acepta sin más la sumisión al verdugo con docilidad, mansedumbre e, incluso, disculpa.
Rodeé el molino con cautela, pero la puerta de delante también estaba cerrada por dentro.
Tuve que engarriar por la pared de piedra hasta el corredor de arriba, que tenía la puerta arrimada. Crucé la habitación hasta las escaleras que bajan al molino y ya vi con mis propios ojos cómo la torturaba al lado de la tolva y de las muelas: le había atado los brazos a los ganchos de la viga donde se cuelga a los cerdos cuando se hace la matanza por mi santo, para que se oreen durante una noche.
¡Estaba desnuda, de puntillas, aguantando para no descoyuntarse las articulaciones con el peso del cuerpo!
¡Tenía el mango de una azada metido en la vagina!
Encima de la mesa: la jaula. Había sustituido los jilgueros por dos ratones con las colas atadas por sendas cuerdas de bramante. Le dijo babeando con los ojos rojos y salidos:
—¡Te comerán las tripas colgados de los pezones!
Empezó la maniobra. Al abrir la puertecita enrejada de alambres casi se le escapan chillando y revolviéndosele en las manos.
Cuando estaba atando el primero para dejarlo colgado sobre el vientre, Gelvira perdió el sentido y se le ocultó el rostro en el cabello al reclinar la cabeza hacia delante un poco ladeada.
Por más que lo intentó, aquella bestia furibunda disfrazada de persona no fue capaz de atar las cuerdas a los pechos porque los pezones no eran prominentes por no haber sido madre, y los ratones saltaban compulsivos hasta la cara de Gelvira escondiéndose entre las ondas y los tirabuzones, hasta que se le escabulleron de entre las manos y se escondieron detrás de unos sacos por las rendijas entre tabla y tabla del suelo.

Sort:  

muy buena tu publicación.

good 2 see another language gets boring seeing the same 1 all the time then some idots judge u for the way u speak it.

Coin Marketplace

STEEM 0.29
TRX 0.12
JST 0.033
BTC 63457.41
ETH 3119.12
USDT 1.00
SBD 3.94