UN DIA INOLVIDABLE Y PASAJERO
Todo comenzó cuando de alguna u otra manera fui a dar en casa de mi abuelo, en ese momento me encontré a uno de mis tíos. Tío Luis rutinariamente pasaba desde la mañana sentado en la sala resolviendo algún ejercicio matemático, pues daba clases particulares y realizaba tareas dirigidas.
Ahí estaba yo junto a él, conversando sobre algunas noticias publicadas en el periódico del día y sobre alguna observación que les hacía a los estudiantes que lo visitan. Un vaso de café con leche me ofrece con pan, esto lo hace siempre cuando llego a visitarlo, sin importar la hora “perennemente guardaba un poco para mí”.
El día transcurría normal, me envía a comprar un litro de leche para la cena de mi abuelo. Luego de regresar de la panadería nos disponemos a ver los programas deportivos en la televisión para conocer los resultados de los juegos de béisbol y futbol hasta llegar la hora del almuerzo. Después de almorzar llega un estudiante a solicitar una hora de clases, el acepta amablemente revisar los ejercicios y procede a explicarle tranquilamente.
Va llegando la hora de irme a casa, en eso, una extraña sensación se apodera de mi, la escena que estoy viviendo se va desvaneciendo gradualmente, ya no veo a mi tío ni escucho su voz.
¡¿Qué está pasando?¡ pienso inmediatamente.
Un ligero silencio invade mi mente y en un parpadeo me encuentro en mi cama, despierto. ¿Acaso he vivido un día paralelo o es mi necesidad de volver a disfrutar un momento con él y por eso tuve ese sueño?, pues tío ya tiene 9 años que ha dejado esta vida y es imposible que pueda venir a la vida nuevamente. Tal vez no fue real pero sentí una sensación enorme al volver a verlo como una nube pasajera o una estrella fugaz, todo fue rápido pero inolvidable lo que viví la madrugada de hoy.
Esto ha sido todo por los momentos, espero les haya gustado.