Historias De Personas Que Vieron Un OVNI

Desde todos los rincones del mundo las noticias sobre seres extraños que hicieron sus asombrados pobladores, pueden atribuirse en muchos casos a alucinaciones o espejismos, pero ¿siempre es así? Veamos algunos ejemplos.

Extraño Caso En Brasil

En la tarde del 14 de diciembre de 1957, los hermanos Moreira trabajaban en su sembradío, cerca de Pernambuco, Brasil, cuando vieron en el cielo una luz que parecía seguir sus movimientos. La luz se acercó a tal punto que los campesinos se asustaron y salieron corriendo.

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La tarde siguiente, cuando uno de los Moreira estaba en el campo, apareció la misma luz. El hombre intentó escapar en tractor, pero éste dejó de funcionar. La luz se acercó más, y entonces el campesino vio un objeto circular que sostenían tres patas. Varios hombrecitos bajaron del artefacto, se apoderaron del campesino y lo llevaron al interior del aparato. Lo despojaron de sus ropas, tomaron una muestra de sangre de su barbilla y le pasaron una especie de esponja por todo el cuerpo. Después fue conducido a otro compartimento y tendido sobre una litera. Minutos después notó una fetidez y sintió náuseas. Se abrió la puerta y entraron dos hombrecitos acompañando a una mujer desnuda, de corta estatura. Más tarde, el campesino diría que parecía china, aunque su cabello era rubio, carecía de cejas y de vello en el cuerpo.

La mujer se acercó al campesino, lo sedujo en silencio, y salió. El campesino se vistió y fue llevado junto a su tractor. Desde allí vio al aparato despegar a gran velocidad. En el suelo quedaron las huellas de las tres patas.
Durante unas semanas tuvo úlceras en cara y brazos, y sufrió fuertes náuseas. Se comprobó que eran debidas a una fuerte dosis de radiaciones.

También En Francia

Sucedió en un lugar llamado Valensole, situado en Francia, el 1 de julio de 1965. Una mañana, cuando un tal Masse se disponía a iniciar su jornada de trabajo en el campo, vio descender del cielo un extraño objeto. Era algo que recordaba vagamente la forma de un melón. Tenía el tamaño de un auto pequeño y un tono mate. Se sostenía sobre cuatro patas y un soporte central. Se parecía, según Masse, a una araña monstruosa.

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A un lado del aparato vio un hombrecito de tamaño igual al de un niño de ocho años. Su traje era de una sola pieza, sin
casco, y tenía las manos desnudas.

Más tarde, Masse se negó a decir lo sucedido desde el momento en que vio al hombrecito, hasta que éste se fue a bordo del extraño aparato. Pero autoridades como Charles Bowen, director de la revista Flying Saucer Review, apuntaron que el campesino tal vez sufrió una experiencia de tipo sexual, que no quiso revelar. Este caso nos recuerda el caso sucedido en Brasil, muy sonado que tiene por protagonistas al matrimonio Hill.

Se Le Fue La Luz A Los Estudiantes

Sucedió una noche de noviembre del año 1968, en una casa de varios pisos que hay entre las calles de Sierra Fría y Paracaina, en las Lomas de Chapultepec de la ciudad de México.

Dos jóvenes estudiantes de la Universidad Iberoamericana estudiaban a la una y media de esa noche. El día siguiente debían pasar un examen importante para la carrera que estudiaban: Técnicas de la Comunicación. De pronto se fue la luz.

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Se les ocurrió asomarse a la ventana para ver si a falla era sólo del edificio o había más casas a oscuras, y de pronto lo vieron, casi enfrente de sus narices. Uno de los estudiantes haría algún tiempo después la siguiente descripción:
-Era un objeto alargado, como de cigarro, que se mantenía a unos ocho metros por encima del edificio vecino al nuestro. Debía tener sus casi veinte metros de largo, con tres o cuatro círculos semejantes a escotillas de un barco. Estaba inmóvil y ya lo veía como medio difuso. Repentinamente, se alzó lentamente, dejando los círculos una estela color blanco. Comenzó a balancearse de un lado para otro, y salió disparado rumbo al este, a tremenda velocidad. Poco después regresó la luz.

¿Y quiénes fueron los dos jóvenes estudiantes que presenciaron aquel hecho insólito? Tal vez los conozca usted. Uno es Ricardo Ortega, actual director de la revista juvenil "POP", y el otro es Juan Ruiz Healy, que aparece en televisión en los programas de Jacobo Zabludovsky.