La historia es así: Domingo 29 de septiembre de 2.019, casi la una de la tarde; vivo en Guanare estado Portuguesa. Un lugar en donde el verano es inclemente y el ¿invierno? también. Bajaba de una tomar una nota periodística en un liceo, y al momento de esperar el transporte que me llevaría a mi casa. Ví en una redoma y en una isla, una especie de jardines ignorados por los transeúntes, no obstante, estos se volvieron apetecibles al ojo de mi cámara.

En la famosa foto de portada, se puede apreciar que la Estatua que le da nombre a la redoma y a esa avenida: Juan Fernández de León, se ve muy bien adornada con esos jardínes, que le dan mayor belleza. No nos equivoquemos, la ciudad tiene naturaleza y esa naturaleza llena de plantas y árboles, le da mucha vistosidad a nuestros espacios. Por ello tomé una segunda toma

En esta panorámica, quise acercarme más a la estatua, y realzar más las sombras del árbol a la derecha y el piso lleno de vegetación.

Está demás decir que la cámara de este celular, se porta bien con buena iluminación, quise captar el efecto y el brillo de la luz solar en la imagen. Es bastante incómodo cuando el f....ng sol te pica en la piel, jaja

Realmente es atrayente a la vista, el color de las hojas de esa planta de la cual no me sé el nombre pero entre amarillo y verde, me relajó el estrés de tener hambre e irme a mi casa.

Demás está decir que las plantas en sus colores, hacen un contrapunteo por expresar cual es la de mejor colorido.

Soy muy malo para saber nombres de plantas y matas ornamentales. en esta imagen me gustó el color rojizo de este ejemplar.

Los tres colores, es como decir si fueran mujeres: la rubia, la morena y la india, con todo respeto.