En blanco

Da que pensar. En Málaga saldría lo mismo que ya salió en Málaga. Las últimas elecciones generales dieron cuatro diputados por Málaga al PSOE, dos al PP, otros dos a Ciudadanos -aunque con algo más de voto que al PP-, dos a Podemos, con algunos votos menos, y uno a Vox. El CIS o Tezanos, según la intencionalidad de la “información” (eso que antes sólo podía tener el género de la “opinión”, intencionalidad), no le otorga representación ninguna por Málaga a Más País, el partido de Íñigo Errejón. De hecho, en toda España, que es el país al que se refiere la candidatura de Más país, sólo obtendría dos diputados por Madrid.

Último Sondeo CIS España

Y si sale lo mismo el próximo 10 de noviembre, algo que ocurre casi en todo este más país con ñ según el último sondeo del CIS, uno podría pensar que la ciudadanía se ha confabulado, todos a una, para votar lo mismo que el pasado 28 de abril y dar así una lección a quienes no han sido capaces de administrar con responsabilidad su mandato. Suena bien, pero no es así.
La ciudadanía no es una. No lo es casi nunca. Quizá ante asuntos que provoquen una emoción humanitaria lo parece, al margen de que pensar esto pueda estar provocado por esta celebración de todos los santos o por la cercanía de la Navidad. Pero en política, además de los asuntos del bolsillo a la hora de echar según qué papeleta en la urna, lo de cada uno pesa más que lo de todos. Y por la misma razón tribal, interesada, ideológica, moral, pragmática o de cualquier otra índole por la que ya votaron quienes lo hicieron el pasado 28 A parece que lo volverán a hacer el 10 de noviembre.

Otra cosa es creerse o no lo que dice el último barómetro del malogrado Centro de Investigaciones Sociológicas. Duele que, excepto por críticos muy dirigidos y en momentos de tensión electoral, el CIS nunca fue puesto en solfa por la gente de a pie o patinete. La responsabilidad de haber puesto al frente del organismo oficial a un hombre de partido, al margen de la cualificación indiscutida del sociólogo José Félix Tezanos, la tiene quien lo ha hecho para algunos a las claras y para otros de manera descarada. Una lástima más que habrá que entablillar cuando todo se vuelva a reequilibrar un poco.

Candidatos Elecciones Generales 10 N

Otra cosa será calibrar y luego valorar la abstención y el más militante y cívico voto en blanco que resulte del 10 N. Una democracia sana y educada, no una marrullera e ignorante, se preocuparía mucho antes y después del 10 N de la abstención y del voto en blanco. Pero aquí, en el sur, en concreto en lugares como Málaga, “en blanco” suena fonéticamente a pescao en blanco o a emblanco directamente, un caldito sustancioso y llevadero que apetece calentito y con limón. Un caldo que no muchos se tomarán después de haber votado en blanco como señal de protesta, como legítima denuncia de la escasa calidad política de quienes le piden el voto otra vez en el maratón electoral más irresponsable y en el momento quizá más delicado de nuestra historia democrática. Y lo digo en nombre de todos los santos. De esos santos votantes que creen que su voto en blanco les importará a quienes terminen gobernando sin pudor con menos votos que nunca.

(c) Domi del Postigo / www.domidelpostigo.es