¡Qué bien! Sueño con el día en que en cada casa por lo menos haya un músico, estoy convencida de que es la manera como puede cambiar nuestra sociedad. Mi hijo tiene un mariachi, y es director de una orquesta, los niños participan en la misma , es posible que más adelante se integren al mariachi, por ahora él y su esposa son los que con tesón y buen ánimo salen a dar esas bellas serenatas, es un mundo complicado, sin horarios y a veces triste cuando los solicitan para velorios, esos homenajes desgastan mucho emocionalmente, pero es un trabajo que hay que hacer siempre bien. Te felicito porque eres un buen padre y estás sembrando la música en tu hogar. Éxito.