ENCUENTRO CERCANO EN LOS ANCARES

in #ovnis6 years ago (edited)

 «Nos dirigíamos a Balouta. Era una de tantas excursiones que hacíamos  por el Valle de los Ancares, en León, para conocer y disfrutar de la  zona –nos narraba Julián–. Sólo que esta vez habíamos salido de la  peluquería en donde trabajábamos alrededor de las ocho de la tarde y se  nos echó el tiempo encima». Julián Alonso Velasco, Chelo Martínez  Llamas, su hijo Alonso de nueve meses y Pablo de la Varga se dieron  cuenta de que se estaba haciendo de noche, así que decidieron dejar el  coche en el pueblo de Tejedo y ascender hacia una cabaña situada dos  kilómetros antes de la cima del puerto. Pretendían pasar allí la noche y  al día siguiente reiniciar la marcha hacia Balouta, al otro lado del  valle.Chelo se percató de que una luz anaranjada del tamaño de un faro parecía seguirles a lo lejos, pero no le dio ninguna importancia. A  las 22:30 horas alcanzaron la caseta, desde la que se observa todo el  valle. Esa noche del 18 de julio de 1977 no había ni una sola nube y la  visibilidad era perfecta. Alrededor de las 22:45 horas, Julián y Paco se  sentaron a la entrada de la construcción de madera, mientras María y el  niño se quedaban en el interior.De repente, un enorme resplandor  blanco surgió en la parte alta del valle, tras la montaña, y acto  seguido avistaron un objeto volador de forma circular y color butano. El  OVNI desaparecía en un punto del horizonte y unos cinco minutos más  tarde se materializaba en otro.Así estuvo un buen rato, de modo  que tuvieron tiempo de sobra para avisar a Chelo, que no quiso perderse  el espectáculo. En cierto momento, el OVNI se aproximó tanto  a ellos que la mujer decidió entrar en la caseta para proteger a su  hijo de lo que pudiera pasar. Justo cuando el No Identificado pasó por  delante de ellos, observaron un intenso fogonazo que «recorrió» el cielo  de derecha a izquierda, hasta detenerse encima de un río situado a unos 150 metros de los testigos.Julián  describió el objeto volador como «una bola esférica enorme del tamaño  de un autobús de dos pisos». Se quedó quieto durante unos 20 o 30  segundos y desapareció sin emitir ningún tipo de ruido.Nuestro  informante y su amigo ascendieron hasta la cima de la ladera para  intentar observarlo por la otra vertiente del valle, y pudieron  contemplar cómo una especie de estela blanca ascendía hasta perderse en  el cielo. La sorpresa vino cuando miraron sus relojes y se  dieron cuenta de que eran las dos de la mañana. Habían transcurrido casi  tres horas y media, cuando ellos estaban convencidos de que el  avistamiento había durado mucho menos tiempo.¿Qué ocurrió realmente aquella noche en Los Ancares? 

Coin Marketplace

STEEM 0.30
TRX 0.12
JST 0.033
BTC 64093.86
ETH 3123.80
USDT 1.00
SBD 3.94