Continúo a través de este medio describiendo esos pequeños animales que hacen vida dentro de cualquier huerto casero. En esta oportunidad me hallé con dos curiosidades, una lagartija y un ciempiés.

Haciendo la limpieza del espacio donde cultivo algunas plantas conseguí una pequeña lagartija sin su preciada cola. Se encontraba cerca de una de las plantas que más la atraen, la mata de fresas.

Supe por medio de @volcandemorcilla que las lagartijas les gustan las fresas porque le extraen el agua, es verdad, si me descuido, se comen ellas las frutas primero que yo, las dejan secas y blancas pálidas.

Volviendo al tema de la curiosidad, creo que la lagartija ya tenía algunos días de haber perdido la cola porque se ve claramente en la fotografía el nuevo nacimiento de la misma.

¿Cómo perdió el reptil su colita? Supuse que en alguna pelea con otro animalito o como bien lo dice su historia, se desprendió de ella para alejar a su depredador.

Según logré leer, para que una lagartija regenere su cola puede tardar más de 60 días. Cuando se ven en peligro, la suelta y ella continúa moviéndose, de este modo distrae a su rival.

Cerca del pequeño reptil se encontraba un ciempiés, estaba escondido debajo de una piedra y no sé por qué intuí que la pelea había sido con el artrópodo. Aunque, al decir verdad, vi herido al ciempiés y fue esa la causa de mi intuición.

Al tomar la fotografía me parecía que una parte del cuerpo del ciempiés no era normal. No quise molestar al gusano porque además se mostraba alterado o es su naturaleza reaccionar rápidamente cuando se siente amenazado. Coloqué de nuevo la piedra dejándola como estaba para que se sintiera seguro.

La lagartija se alejó rápidamente y el gusano supuse, también se quedaría tranquilo donde estaba.

Es curioso el cuerpo del ciempiés, la piel es crujiente je,je,je. Cuando niña los aplastaba y se escuchaba el crujir. También la cantidad de patas muy chiquitas son llamativas.

Corroncho/conchudo, recuerdo era como lo llamábamos mis hermanos y yo.

Observarlo de cerca me hizo ver el parecido con la culebra de dos cabezas. Sus extremidades se confunden.

Unos días después vuelvo a levantar la piedra donde se encontraba el gusano y… sorpresa… el gusano no estaba pero, ¡¡había dejado su piel!!

Fue allí cuando comprendí que no estaba herido cuando lo encontré la primera vez. Se encontraba en aquel nicho mudando el cuero.

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¿Sabias que el ciempiés puede mudar la piel al menos seis veces y en la medida en que ocurre el proceso natural aumentan también sus pares de patas? Este proceso culmina cuando logra convertirse en adulto.

¿Por qué se halla un ciempiés en un pequeño huerto? Aparte de buscar escondite para mudar el cuero, lo hace porque se alimenta de otros artrópodos como las cucarachas, larvas y arañas, creo que sería lo único que en mi huerto pudiese conseguir.