When I was about 17 years old, I lived in the house of an aunt of mine. One of my cousins ​​liked music and he played cuatro. Sometimes we played some songs together. That's how one day we thought that we could go for a serenade. Especially for that I recorded several cassettes (yes, that was the most advanced technology at that time) with music from Los Panchos group, La Rondalla Venezolana, Los Naipes trio and some songs by Julio Jaramillo, Chucho Avellanet, Danny Rivera and José Feliciano.

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_{Trio Los Panchos [Source - Fuente - Quelle]}

It was in this way that I came into contact with the bolero, one of the most important genres of Caribbean or Cuban music, to be more specific, and other genres that lend themselves to serenade such as the waltz, the son and some more commercial rhythms. But with the characteristic of being able to be interpreted to voices, with the accompaniment of guitar, cuatro and some portable percussion instruments, such as maracas.

The practice of serenade to a lady, comes from the medieval era and has been characterized by the fact that it may be done by even a single singer accompanied by a portable instrument, to express feelings of love in a song. This custom gained great popularity in Latin America and in the countries of the Caribbean it made the bolero one of its highest expressions. For this type of activity, guitar trios and rondalla groups became famous, which are the equivalent of tunas in Spain. Also in Mexico, mariachi serenades became customary and the bolero achieved such a level of roots in that country, that it was there that what is known as the Mexican bolero emerged.

In Caracas, the capital of Venezuela, the serenades produced a series of musical movements, including even cañonera music. If you see the post that I did about that musical genre in The full story of the cañonera music, you can see that I speak about a serenade current of that musical form.

Although in our case we did not serenade with a love purpose, there is no doubt that these have their emotional impact on women, because the emotion that produced in all the houses where we came with our music, was indisputable. Maybe it has to do with aspects of our idiosyncrasies as Latinos, but I think it can be an innate sensibility, because the passions that aroused minstrels since the middle ages are famous. Likewise I know that we awoke some passions also by singing our romantic repertoire.

That was at all times such an extraordinary experience, that made the serenade music: the boleros, waltzes and songs in general left a deep impression on me, as well as authors and performers of these musical forms.

My previous publication includes a parranda (Piensa en mí), which takes as a basis the chorus of one of those boleros that I used to play in serenades and that is by the authorship of Agustín Lara, one of the most important composers of this genre. Which shows that this music is still living in me and that's why it's part of #mymusic.

Music at the end of this post!

_{[Source - Fuente - Quelle]}

Español

Cuando yo tenía como 17 años, yo vivía en casa de una tía mía. A uno de mis primos le gustaba la música y tocaba cuatro. A veces nos poníamos a tocar algunas canciones juntos. Así fue como un día se nos ocurrió que podíamos ir a dar unas serenatas. Especialmente para eso grabé varios casetes (sí, esa erala más avanzada tecnología en esos tiempos) con música del grupo Los Panchos, La Rondalla Venezolana, el trío Los Naipes y algunas canciones de Julio Jaramillo, Chucho Avellanet, Danny Rivera y José Feliciano.

Fue de esa manera que entré en contacto con el bolero, uno de los géneros más importante de la música caribeña o cubana, para ser más específico, y otros géneros que se prestan para la serenata como lo es el vals, el son y algunos ritmos más comerciales. Pero con la característica de poder ser interpretado a voces, con el acompañamiento de guitarra, cuatro y algunos instrumentos de percusión portátiles, como las maracas.

La práctica de llevar serenas a una dama, viene desde la época medieval y se ha caracterizado por el hecho de que va, aunque sea, un solo cantante acompañado de un instrumento portátil, para expresar sentimientos de amor en una canción. Esta costumbre ganó gran popularidad en América Latina y en los países del Caribe convirtió al bolero en una de sus máximas expresiones. Para este tipo de actividad se hicieron famosos los tríos de guitarra y los grupos tipo rondalla, que son el equivalente a las tunas en España. También en México se hicieron costumbre las serenatas de mariachi y el bolero logró tal nivel de arraigo en ese país, que allí surgió lo que se conoce como el bolero mexicano.

En Caracas, la capital de Venezuela, las serenatas produjeron una serie de movimientos musicales, donde entra inclusive hasta la música cañonera. Si ven la publicación que hice sobre ese género musical en El cuento completo de la música cañonera, podrán ver que hablo sobre un vertiente serenatera de esa forma musical.

Aunque en nuestro caso no dábamos serenatas con un fin amoroso, no cabe la menor duda de que éstas tienen su impacto sentimental en las mujeres, pues la emoción que producía en todas las casas a donde llegábamos con nuestra música, era indiscutible. Quizá tenga que ver con aspectos de nuestra idiosincrasia como latinos, pero pienso que puede ser una sensibilidad innata, pues son famosas las pasiones que despertaban los juglares desde la edad media. Así mismo sé que nosotros despertábamos algunas pasiones también cantando nuestro repertorio romántico.

Esa fue en todo momento una experiencia tan extraordinaria, que hizo que las música de serenata: los boleros, valses y canciones en general dejaran una huella profunda en mí, así como autores e intérpretes de estas formas musicales.

Mi publicación anterior incluye una parranda (Piensa en mí), que toma por base el coro de uno de esos boleros que yo solía interpretar en las serenatas y que es de la autoría de Agustín Lara, uno de los más importantes compositores de este género. Lo cual demuestra que esta música sigue viviendo en mí y por eso forma parte de #mymusic.

¡Música al final de esta publicación!

_{[Source - Fuente - Quelle]}

Deutsch

Als ich ungefähr 17 Jahre alt war, lebte ich im Haus einer Tante von mir. Einer meiner Cousins ​​mochte Musik und er spielte Cuatro. Manchmal spielten wir einige Lieder zusammen. So dachten wir eines Tages, wir könnten ein Ständchen machen. Speziell dafür habe ich mehrere Kassetten aufgenommen (ja, das war damals die fortschrittlichste Technologie) mit Musik der Gruppe Los Panchos, La Rondalla Venezolana, Los Naipes-Trio und einigen Songs von Julio Jaramillo, Chucho Avellanet, Danny Rivera und José Feliciano.

Auf diese Weise kam ich mit dem Bolero in Kontakt, einer der wichtigsten Genres der karibischen oder kubanischen Musik, um genauer zu sein, und anderen Genres, die sich für ein Ständchen eignen, wie der Walzer, der Son und andere kommerzielle Rhythmen. Aber mit der Eigenschaft, in Stimmen interpretiert zu werden, mit der Begleitung der Gitarre, Cuatro und einigen tragbaren Percussion-Instrumenten wie Maracas.

Die Praxis der Serenade für eine Dame stammt aus dem Mittelalter und wurde durch die Tatsache gekennzeichnet, dass sogar ein einzelner Sänger zusammen mit einem tragbaren Instrument das Gefühl der Liebe in einem Lied ausdrücken kann. Dieser Brauch erfreute sich in Lateinamerika großer Beliebtheit und in den Ländern der Karibik machte er den Bolero zu einem seiner höchsten Ausdrucksformen. Für diese Art von Aktivität wurden Gitarrentrios und Rondalla-Gruppen berühmt, die den Thunfischen in Spanien entsprechen. Auch in Mexiko wurden Mariachi-Ständchen üblich, und der Bolero erreichte in diesem Land so viele Wurzeln, dass dort der sogenannte mexikanische Bolero entstand.

In Caracas, die Hauptstadt Venezuelas, produzierten die Serenaden eine Reihe von Musikbewegungen, darunter sogar Cañoneramusik. Wenn Du den Beitrag zu diesem Musikstil in The Cañonera music fully explained liest, kannst Du sehen dass ich über einen Serenadentendenz dieser musikalischen Form spreche.

Obwohl wir in unserem Fall nicht mit einem liebeszweck Ständchen machten, besteht kein Zweifel, dass diese eine emotionale Auswirkung auf die Frauen haben, denn die Emotion, die in allen Häusern hervorrief, in denen wir mit unserer Musik kamen, war unbestritten. Vielleicht hat es mit Aspekten unserer Eigenheiten als Latinos zu tun, aber ich denke, dass es eine angeborene Sensibilität sein kann, weil die Leidenschaften, die seit dem Mittelalter Minnesänger erregt haben, berühmt sind. Ebenso weiß ich, dass wir auch durch das Singen unseres romantischen Repertoires einige Leidenschaften geweckt haben.

Das war zu allen Zeiten ein so außergewöhnliches Erlebnis, das die Serenadenmusik auslöste: Die Boleros, Walzer und Lieder im Allgemeinen hinterließen einen tiefen Eindruck bei mir sowie Autoren und Künstler dieser Musikformen.

Zu meiner vorherigen Veröffentlichung gehört eine (Piensa en mí), die den Chor eines dieser Boleros, den ich früher in Serenaden spielte, als Grundlage nimmt, und zwar durch die Urheberschaft von Agustín Lara, einem der wichtigsten Komponisten dieses Genres. Was zeigt, dass diese Musik immer noch in mir lebt und deshalb Teil von #mymusic ist.

Music – Música – Musik

Sin ti – Trio Los Panchos

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Piensa en mí – Agustín Lara

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Ingenua (Dumbi dumbi) – Trío Los Naipes & Mirtha Pérez

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Miénteme – José Feliciano

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