Weekly Contest, "Creating Stories Week #31". /Concurso Semanal, "Creando Historias Semana #31". @jhojan201

Capítulo 1

La primera vez que vi a Willian , no era más que un payaso miserable actuando en la calle. Se estaba ahogando en ropa holgada, su llamativo maquillaje de pintura grasa manchado alrededor de su rostro, su expresión cómicamente exagerada. Delante de él había un cuenco roto para las propinas que esperaban ofrecer los aldeanos que pasaban en agradecimiento por su actuación.

Desafortunadamente, su actuación fue terriblemente aburrida y los aldeanos no tenían ningún interés en absoluto. Incluso el estiércol de oveja arrojado por un mocoso local en el cuenco de Willian despertó más interés. El silencio era su propio tipo especial de burla tácita, pero aún así continuó dándolo todo incansablemente. Estaba haciendo todo lo posible para aprovechar la oportunidad de salir de la tierra y ser reconocido por sus esfuerzos. Confianza, humillación, humildad y constancia. El deseo ardía en sus ojos, cualquiera a su alrededor casi podía oler su alma ardiente.

Me acerqué a él y dejé caer una moneda de oro en su cuenco roto."¡Gracias por su generosidad, amable señor!" Mientras hablaba, la visión de su maquillaje agrietándose con la contorsión de sus rasgos me dio náuseas. Oh, este payaso tonto, realmente no lo entendió. No hay actos de generosidad en los tratos con Demonios, solo una suma de interés cada vez mayor.

Capitulo 2

La próxima vez que vi a Willian , usó esa moneda de oro para dejar el pueblo y mudarse a la ciudad, donde se estableció como el actor principal en un teatro importante. Hizo todo lo posible para subir la escalera. Aprendió de los mejores actores, exploró cada callejón y calle para recopilar los mejores chistes y practicó en el espejo hasta altas horas de la madrugada todos los días. Sin embargo, su movimiento más crucial fue sin duda envenenar la medicina para la garganta de su maestro la noche antes de la selección del actor.

Impulsado por su deseo, Willian se había vuelto completamente inescrupuloso, haciendo cualquier cosa para lograr sus fines. Tienes que admitir que este tipo de persona sin duda hace las cosas. Pero, ¿satisfizo eso sus deseos? Al verlo en el escenario, su público abajo en una risa desenfrenada, su público todavía solo ve un payaso, una herramienta para reír. No reconocen a Willian más que el mocoso que arrojó estiércol de oveja en su cuenco.

Esos humildes comienzos como payaso son como una cicatriz, lo que garantiza que nunca llegará a ser más que una broma. Sospecho que pronto dejará el teatro en busca de un mayor reconocimiento.

Capítulo 3

Han pasado tres años y ahora Willian es el bufón favorito del príncipe Edwin en King's Manse. Al unirse a los reinos de los poderosos, había hecho todo lo posible para liberarse de su cicatriz, pero en cambio elevó su estatus de payaso, de 'broma' a 'broma más grande'.

Es fácil pensar que uno tiene poder simplemente porque se codea con los poderosos, y eso despertó los deseos de Willian , instándolo a buscar la oportunidad de convertirse en parte de la corte del palacio propiamente dicha. Pronto se presentó esa oportunidad. El hijo menor del príncipe Edwin de repente cayó gravemente enfermo y, en poco tiempo, murió. Edwin hizo todo lo que pudo para encontrar una cura para su amado hijo, ofreciendo enormes recompensas para aquellos que pudieran salvar al niño por cualquier medio. Fue en este momento que planté un antiguo pergamino mágico en la cabecera de la cama de Willian .

Capítulo 4

Vestido con exquisitas sedas y galas, Willian fue arrastrado por los soldados del príncipe Edwin, encadenado y arrojado a la cárcel. Él suplicó y gritó su inocencia, diciéndoles a todos en la cárcel que él no tenía la culpa rogando a los soldados que "¡Déjenme hablar con Edwin!" y otras tonterías mientras giraban y se marchaban. Oh, tonto payaso. Dejas que tus deseos nublen tu juicio. Ese pergamino realmente fue capaz de disipar enfermedades, pero tal 'bendición' tuvo un precio elevado ...

La magia convertiría a uno en un No muerto atrapado entre la vida y la muerte, destinado a no morir nunca, pero condenado a soportar una eternidad de agonizante descomposición por toda la no-vida. En cuanto a la causa de la enfermedad repentina, ¿puedes adivinar?

Como resultado de mis acciones, Willian recibió un trato "especial" en la cárcel, sometido a todo tipo de torturas indescriptibles a manos de carceleros sociópatas. Un carcelero en particular fue excepcionalmente despiadado: Seifer. Usando el extremo de su látigo, azotaba las mejillas de Willian hasta que estaban tan hinchadas y ensangrentadas que no podía hablar. Pero eso no impidió que su deseo ardiera, no tenía ninguna intención de dejar que su vida terminara aquí de manera tan lamentable. ¡Tenía un odio amargo por todos los que lo reducían a esto!

" Willian , vamos a hablar." Aparecí ante él en mi verdadera forma hipogea, "Sé lo que quieres. Puedo ayudarte".

"Sabes ... Jack todo ..." Estaba tirado en el suelo, tosiendo enormes charcos de sangre. "Tú también has venido a burlarte de mí ... como todos los demás".

"En realidad, te conozco mejor de lo que te conoces a ti mismo." Ignoré su mala actitud y continué: "Un simple reconocimiento. Igual respeto. Estas no son solicitudes exigentes, pero a ti tampoco te han dado. ¿Es eso justo?" Hubo un destello de luz en sus ojos apagados.

"Puedo darte la oportunidad que quieras, la oportunidad de enfrentarte a todos aquellos que se burlaron de ti, que no le dieron ni un vistazo a tu arduo trabajo…" Sostengo su mirada, susurrando, "¡y los mato a todos!"

"Tu poder… ¡Por favor, dámelo todo, ayúdame a vengarme de todos los que me despreciaron!" Willian finalmente había decidido, su voz bajó casi a la inaudibilidad, "¡Una vez que todos mis enemigos estén muertos, te prometeré mi alma!".

"Trato." Conozco las identidades de sus enemigos, solo unos pocos simples mortales, susceptibles de morir por causas naturales en unas pocas décadas de cualquier manera. Fue en este momento que su vida estaba llegando a su fin, si esperaba más, esta alma rebosante de deseo se perdería. No podía permitirme esperar más.

Me incliné sobre su cuerpo, usando su propia sangre para dibujar un símbolo que le otorgaba el poder de aquel demonio. En esos charcos de sangre salpicada, Willian renació como un Demonio.

Capítulo 5

Pasó medio año y Willian regresó a la cárcel, masacrando rápidamente a todos los que se habían burlado de él e incluso hechizando al príncipe Edwin, lo que provocó una gran lucha civil en King's Manse. Ahora, solo queda un enemigo: Seifer, el carcelero que lo torturó tan crue

lmente.

Mientras estoy detrás de Willian y Seifer, nuestro trato está a punto de llegar a su fin. Willian vuelve la cabeza hacia mí de repente, riendo, "Antes de hacer esto, hay algo que quiero que veas". Mi corazón da un vuelco cuando tengo la extraña sensación de que algo no está del todo bien. Willian toma un pergamino y lo tiende frente a él. Lo reconozco de inmediato, es el mismo pergamino que planté en su cama, el pergamino que llevó al hijo de Edwin a convertirse en un No muerto. ¡Maldita sea! ¡Me han engañado!

Corrí hacia Seifer para romperle el cuello, pero ya se había convertido en un No muerto, su lengua estaba completamente podrida por la magia. Gritó, pero no se escuchó ni un pío. Ni siquiera el Diablo puede matar a un nacido en la tumba. Si el enemigo final de Willian era verdaderamente inmortal, entonces mi trato con él nunca podría terminar. Animé su deseo, y ahora nunca más necesitará buscar la aprobación de los mortales, ya que en cambio ha ganado algo que codicia y que solo posee un Demonio. ¡Él tiene mi poder para siempre!

Escucho su estruendosa risa que parece trascender el tiempo y el espacio, atravesando las áridas calles rurales, arrasando los teatros de la ciudad, destrozando los pasillos del palacio llenos de traición y finalmente resonando en la cárcel. Esa es su burla de mí.