Nos compartes una excelente historia que nos deja una gran reflexión. Debemos tomar las cosas con calma y llevar la vida más tranquila. Muchas veces el apuro trae terribles consecuencias. Alicia entendió eso a raíz de ese accidente donde por descuido olvidó colocarse el cinturón de seguridad.
Dios le otorgó una segunda oportunidad, y debía aprovecharla para enmendar sus errores.
Gracias por compartir tan excelente contenido.👍
Saludos cordiales 🌺
Una segunda oportunidad que casi nadie tiene la suerte de tener. La vida es como un tren donde viajas y el freno lo pones tú.
Saludos, bendiciones y un gran abrazo.