Hola amigos amantes de los niños! Me llena de alegría venir a contarles un poco lo que he estado haciendo desde el mes de Octubre de 2020, con el tema de la pandemia notaba que cerca de mi casa los niños jugaban con frecuencia, jugaban a dispararse, eso me preocupaba, pues no veía ninguna orientación por parte de los adultos respecto a esos juegos.

Ya que soy madre de un varón, en la actualidad ya tiene 18 años, puedo decir con propiedad que en su infancia no hubo disparos, ni juguetes asociados a las armas, siempre me pareció descabellado estimular la violencia en los niños comprando artículos de este tipo, de manera que solo hubo una pistola de agua, por que era divertido para jugar en grupo, creo que esta acción motivo a otras madres dentro de la familia a actuar de la misma manera. por lo que entre los sobrinos no hay este tipo de juegos.

Ahora bien, como esto me dejo buenos resultados veía con preocupación que los niños pasaran largas horas jugando a los policías y malhechores, por lo que se me ocurrió hacer una escuela de vacaciones, esto es una estrategia que se emplea desde la iglesia para dar a conocer historias bíblicas con actividades desafiantes y divertidas. Esto resulto ser toda una novedad así que el primer día asistieron 6 niños, vale la pena destacar que la actividad tiene una duración de 3 días.

La Escuela Bíblica de Vacaciones de ese año se llamo Grúas y Concreto, es un material muy bien elaborado que nos es suministrado en nuestro país en calidad de ofrenda, pues para obtenerlo debe ser comprado a la empresa que trabaja para ello. Es importante resaltar que no contaba con suficientes recursos para hacerles grandes meriendas por lo que me planifique darles cosas sencillas que podía hacer en casa.

Prepare una ambientación sencilla pero acorde al tema.

Las hojas de trabajo, tenían que ver con la temática del día.

El juego les resulto divertido y diferente.

Toda esta actividad les pareció diferente y agradable, con el pasar de los día comenzaron las orientaciones para dejar de jugar ese juego de malhechores, ofreciéndoles enseñarles otros juegos, solo fueron 3 días, pero en ese corto tiempo la cantidad de niños aumento. Por lo que se cerro la actividad con 11 niños. Con la promesa de iniciar clases bíblicas una vez a la semana.

Desde octubre 2020 hasta junio 2021 la matricula aumento a 25 niños. Se me sumaron mujeres valientes y amantes, de los niños, ya somos 4 maestras, aunque no contamos con muchos recursos, ni con un espacio suficiente, deseamos desde nuestro corazón poder aportar un granito de arena en la educación de los niños de nuestra comunidad.

Volveré para seguir narrando mis experiencias con los niños de mi comunidad.

Gracias por leer mi post!

Saludos.