Las mentiras tienen patas cortas. Esto significa que siempre habrá alguien que nos vea la nariz de Pinocho, y no nos deje andar muy lejos con la mentirita. Yo no soy muy buena mintiendo, pero confieso que he dicho varias, y no solo blancas, sino también rojas, jajaja. De esas que indican peligro.

En mi barrio vivía un muchacho que lo llamaban "Mentirita fresca", porque siempre tenía una en la punta de la lengua. Era muy ingenioso para inventar historias. En varias ocasiones llevó palo del bueno por esa costumbre de ponerle picante a la sopa sin necesidad: embarazó a varias vírgenes, mató a un montón de gente llena de vida, y metió en la cárcel a muchos ángeles de Dios.

Ahora bien, contrario a lo que la gente dice, las verdades también pueden caerles de mal gusto a algunas personas. Así, por ejemplo: no se le puede decir al gordo que es gordo, ni al chismoso, chismoso; y pare usted de contar. En tal sentido, pareciera que las mentiras no son tan hirientes como las verdades ... Jajaja.

En este reto, @lilianajimenez nos propone: crear diez enunciados, de los cuales seis sean verdades y cuatro, mentiras. El objetivo es que mis lectores den con las mentiras, quien las adivine se ganará una "teta" de coco, jajaja. Así que oídos al tambor:

1.- Me gusta dormir, mínimo hasta las diez de la mañana y acostarme a la una de la madrugada.

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2.- Me gusta hacer dulces, pero casi no los como, porque engordo hasta con el aire.

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3.- Soy experta manejando bicicleta. Eso lo aprendí en mi niñez:

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4.- Adoro comer cambur de todos los tipos:

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5.- Me pongo bipolar una vez al mes; ni yo misma me soporto.

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6.- Me encanta tomar refresco, sobre todo Coca Cola:

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7.- Me encanta bailar salsa brava y merengue.

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8.- Me muero por viajar y salir de la casa constantemente.

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9.- No me gusta fumar, pero me agrada el olor a cigarro.

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10.- Me encanta tomar café.

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Si deseas participar en este reto, aquí la información