Mi viejita, rumbo al campo.

Buenas noches a esta gran plataforma, hoy le voy a hablar sobre mi adorada madre .

Mi bella y adorada madre, siempre le ha gustado estar en contacto con la naturaleza, regar sus matas, darle de comer a las gallinas y estar pendiente de unos cochinitos, por lo que se queda mucho tiempo en el pueblo, ella dice que hace mucho calor y ruidos por todos lados. Mi manita siempre la acompaña, no la puede dejar porque tiene dificultad para ver, ya que sufre de diabetes y es su niña mingona a pesar de los 60 años que tiene mi manita. Cuándo nació le dió meningitis. Es un milagro mi polito.

Mi viejita no esta viendo en dónde se va a montar, si le dan el puesto de adelante bien, sino se monta atrás, pero a mi polito si le consigue en el puesto de adelante, se le hace difícil detrás.

Hoy corrió con la suerte de que le cedieran el asiento delantero sino le hubiese tocado ir guindando detrás en el camión.

Que Dios me siga bendiciendo a mi madre y a mi manita, las quiero un montón.

Espero que este contenido sea de su agrado. Hasta luego.