La Caida de Westerplatte (Día 2) - La Guerra de La Supremacía
2 de Septiembre, 09:00
Estuvimos discutiendo toda la noche con el Mayor Sucharski, recibiendo los múltiples mensajes desde todas las regiones de Polonia, la Wehrmacht está arrasando el país al mismo tiempo que nos defendemos aquí. Nuestra posición es lo único que evita la caída de Danzig. Pero de manera práctica, la ciudad ya estaba bajo control alemán.
El ejército enemigo es violentamente superior, el ataque no ha empezado porque justamente están desembarcando más artillería de asedio. Deben ser cañones de 200 mm por lo menos. Inocentemente, como lo dice Sucharski, sigo manteniendo la esperanza en que nuestros aliados se muevan. Hasta donde recuerdo, se supone que los ingleses y franceses se comprometieron su ayuda si cualquier país nos atacaba. El Mayor no comparte mi esperanza, aunque ambos estamos convencidos que debemos resistir hasta el último momento.
13:00
Están lloviendo balas y bombas. Hasta ahora he contado 50 aviones alemanes bombardeándonos. Destruyeron algunos de los búnkeres, tuve que movilizar a las tropas a zonas más seguras. Sucharski está aturdido y fue puesto a resguardo, por suerte sigue vivo. El doctor dice que no tiene ninguna herida severa, tal vez mañana esté en funciones. Mis dotes de mando no están tan desarrolladas para llevar este asedio.
14:26
Nuestro cañón más grande fue inutilizado por los bombarderos que no dejan de barrernos. Ordené a nuestros obuses menores no dejar de disparar, espero que con eso se llame la atención de los alemanes y evitemos la mayor cantidad de muertes posibles.
Por lo menos los alemanes no nos han atacado directamente. Sería todavía peor tener que enfrentarnos a los soldados enemigos en medio de estos bombardeos. Supongo que lo hacen para evitar perder tropas, además que si invaden de nuevo nuestros muros, deben bajar la cadencia de los cañones para evitar matar a sus propios hombres.
19:00
Nuevas noticias por radio, todas malas. Las fuerzas alemanas no están encontrando ninguna resistencia en su avance. Temo por mi familia en Cracovia, espero que conforme se acerquen a la capital exista la posibilidad de detenerlos.