CALABAZA EN TACHA

¡Si, si, ya lo sé! El tiempo de las calabazas ya pasó oficialmente. Pero el mes de octubre no hubo calabazas de esta especie por aquí en donde vivo, y la semana pasada mi mamá me regaló ésta. Y un regalo como éste no se debe desperdiciar sólo porque no es temporada oficial. Además yo no me dejo guiar por las tendencias, más bien me gusta comer lo que se me antoje en cualquier época del año. Puedo comer pavo relleno en abril si me apetece, no necesito esperar a diciembre. De modo que hoy cociné esta calabaza para después preparar un delicioso pay, que también compartiré con Uds.

Muchas personas no se animan a cocinar la calabaza porque se les hace muy abrumador cortarla en trozos. Por eso les presento el proceso desde que se lava, hasta tenerlo en el plato.

Lo primero que debemos hacer es lavar muy bien nuestra calabaza.

Después comenzamos a cortar. Lo difícil aquí es hacer que el cuchillo entre en esa corteza tan dura que tiene esta especie.

Por eso les aconsejo ayudarse de un martillo. Pero para que la herramienta no maltrate el cuchillo yo le puse un paño de cocina y así le di hasta que logré que el filo entrara. Lo que se dificultó a continuación fue sacarlo, pero por fin lo logré. De algo tenían que servir estos bíceps, je, je.

Luego encajé la punta y poco a poco y con bastante fuerza pude partir la calabaza por la mitad.
El resto ya fue más fácil. Si les gustan las semillas como a mí, pueden cocinarlas junto con la pulpa. Lo que si deben quitar es el resto, eso que parecen cabellos de calabaza, je, je,( no se cual es su nombre) amargan la preparación.

Cuando ya la tuve en trozos la puse en una olla de presión y le agregue un piloncillo mismo que trocé (o mejor dicho le pedí a mi hijo que lo hiciera) le agregue una taza de agua y después al fuego por media hora sin poner válvula.

Una vez frio lo serví para que pudieran ver el resultado final y a la espera en el refrigerador para preparar el pay.