Concurso: ¿Recuerdas qué incidentes horribles enfrentaste cuando eras niño?
Mientras más operaciones le hacían a mi abuelo Picho, así lo llamaba yo, más infeliz y amargado este lucía. Después de casi veinte intervenciones quirúrgicas, la ciencia médica se dio por vencida; y él logró caminar con mucha dificultad, arrastrando una pierna y utilizando las paredes como soporte para no caerse. Nunca quiso utilizar silla de ruedas.
Me cuentan que cuando mi abuelo me vio por primera vez; Su rostro se iluminó y dijo: "Se parece a mamá, y se llamará Sol".
Abuelo Picho fue mi padrino de agua y de bautizo. Y yo llegué a sentir la intensidad de su amor, a pesar de que él no era expresivo.
Cuando cumplí 10 años, y pasé de cuarto grado para quinto con excelentes calificaciones, mi abuelo dijo que me haría un regalo que yo nunca olvidaría: Me pagó un pasaje en avión paar que yo fuera a la isla de Margarita a pasar mis vacaciones con mi madrina Marina, que era gran amiga de él.
Yo jamás había salido de casa, nunca había estado en un aeropuerto. Mi hermana Agustina hizo que el viaje fuera placentero, no tuve miedo, Eran diez minutos de vuelo.
Cuando llegué a casa de mi madrina, me impresioné con tanto lujo. El manual de comportamiento lo tenía en mi mente: Despertarme temprano, ayudar a mi madrina con las actividades del hogar, comer poco, barrer. Y lo más importante: NO ORINARME LA CAMA.
Esto era lo que más me preocupaba, a pesar de que tenía 10 años, seguía mojando la cama. Ese que era mi gran secreto, se convirtió en la burla de todos. Ya no recuerdo cuántos consejos escuché: "No puedes tomar agua después de las seis de la tarde", "Cuando sueñes que estás en un río, párate porque eso significa que te está orinando", "No puedes comer helado ni frutas como patilla"... Esos consejos se repitieron toda la noche en mi cabeza. Pero, yo no me preocupaba, porque mi hermana Agustina estaba pendiente de llamarme para que fuera al baño. Sin embargo, llegó el momento de que ella regresara a casa, y yo me quedaría de vacaciones, en casa de mi madrina. Allí comenzaron mis pesadillas.
Me pusieron a dormir con la mamá de mi madrina, que se llamaba "Concha Pico"; una señora pequeñita y flaquita, que tenía una melena larga como la de Rapunzel, pero blanca como la nieve.
La primera noche en ese cuarto, sin mi hermana, me hizo sentir desvalida. No podía dormir. Me quería ir a mi casa. Luego el sueño me venció, y cuando Morfeo me arrullaba en un manantial frío, me despertó un grito aterrador:
-Te orinaste, muchacha del caraj.
Yo salté de la cama con miedo, sentí que había matado a alguien, mi corazón latía a millón. La señora Concha me miraba con instinto asesino.
Era la madrugada y recibí mi castigo: Lavar las sábanas bajo la mirada inquisidora de la señora Concha. Cuando todos se despertaron en casa de mi madrina; yo estaba llorando.
Madrina me preguntó: ¿Qué me pasaba?
Yo no podía responder, porque la señora Concha me dijo:
-Si cuentas lo que pasó, te castigo.
-Nada, madrina, respondí -Extraño a mi hermana; y quiero regresarme a casa.
Mi madrina trató de convencerme de que ya se ma iba a pasar esa tristeza, pero viendo que no salía del cuarto, llamó a mi abuelo y le dijo:
-La muchachita está muy triste, me preocupa que se vaya a enfermar. Creo que la van a tener que venir a buscar.
Al otro día mi hermana estaba en Margarita. Cuando la vi, sentí que volvía a la vida. Me despedí de mi madrina, y de la señora Concha, que mostraba gesto de aprobación con mi partida.
Desde ese entonces, no me gustan las vacaciones. Prefiero quedarme en casa; y no aventurarme a orinar las camas ajenas.
Escribí este post, y volví a llorar como cuando tenía 10 años. Hacerlo me hizo bien, pues me permitió hallar la explicación a mi deseo de no salir de casa.
Invito a mis amigos @acostacazorla, @marcybetancourt y @rosita1. Aquí la información
The more operations they did on my grandfather Picho, that's what I called him, the more unhappy and bitter he looked. After almost twenty surgical interventions, medical science gave up; and he managed to walk with great difficulty, dragging one leg and using the walls as support to avoid falling. He never wanted to use a wheelchair.
They tell me that when my grandfather saw me for the first time; His face lit up and he said, "He looks like Mom, and his name will be Sol."
Grandpa Picho was my godfather for water and baptism. And I came to feel the intensity of his love, even though he was not expressive.
When I turned 10, and went from fourth grade to fifth grade with excellent grades, my grandfather said he would give me a gift that I would never forget: He paid me a plane ticket for me to go to Margarita Island to spend my vacation with my godmother Marina, who was a great friend of his.
I had never left home, I had never been to an airport. My sister Agustina made the trip pleasant, I was not afraid, it was a ten minute flight.
When I arrived at my godmother's house, I was impressed by so much luxury. I had the behavior manual in my mind: Wake up early, help my godmother with household activities, eat little, sweep. And most importantly: DON'T WET THE BED.
This was what worried me the most, even though I was 10 years old, I was still wetting the bed. What was my big secret became everyone's ridicule. I can't remember how much advice I heard: "You can't drink water after six in the afternoon," "When you dream that you're in a river, stop because that means it's urinating on you," "You can't eat ice cream or fruits as a kick." ...Those pieces of advice were repeated all night in my head. But, I wasn't worried, because my sister Agustina was waiting to call me to go to the bathroom. However, the time came for her to return home, and I would stay on vacation at my godmother's house. That's where my nightmares began.
The first night in that room, without my sister, made me feel helpless. I could not sleep. I wanted to go home. Then sleep overcame me, and as Morpheus lulled me to sleep in a cold spring, I was awakened by a terrifying scream:
They put me to sleep with my godmother's mother, whose name was "Concha Pico"; a small, skinny lady, who had long hair like Rapunzel's, but white as snow.
The first night in that room, without my sister, made me feel helpless. I could not sleep. I wanted to go home. Then sleep overcame me, and as Morpheus lulled me to sleep in a cold spring, I was awakened by a terrifying scream:
-You peed yourself, damn girl.
I jumped out of bed with fear, I felt like I had killed someone, my heart was beating like a million. Mrs. Concha looked at me with a murderous instinct.
It was early morning and I received my punishment: Washing the sheets under the inquisitive gaze of Mrs. Concha. When everyone woke up in my godmother's house; I was crying.
Godmother asked me: What was wrong with me?
I couldn't answer, because Mrs. Concha told me:
-If you tell what happened, I will punish you.
-Nothing, godmother, I answered -I miss my sister; and I want to go back home.
My godmother tried to convince me that this sadness would go away, but seeing that I didn't leave the room, she called my grandfather and said:
-The girl is very sad, I am worried that she is going to get sick. I think they're going to have to come look for her.
The next day my sister was in Margarita. When I saw her, I felt like I was coming back to life. I said goodbye to my godmother, and to Mrs. Concha, who showed approval at my departure.
Since then, I don't like vacations. I prefer to stay at home; and not venture to urinate other people's beds.
I wrote this post, and I cried again like when I was 10 years old. Doing so was good for me, as it allowed me to find an explanation for my desire not to leave the house.
I invite my friends @acostacazorla, @marcybetancourt and @rosita1. Information here
Que tierno tu relato solperez, sin darme cuenta me metí en la historia y la viví desde adentro, como si fuera yo.
Cada uno de esos episodios de infancia nos marcan, nos acompañan en un silencio aparente para toda la vida.
Si algún día, de adulto, te orinas la cama, no importa, disfruta tu río, yo, si quieres, puedo lavar tus sábanas, besar tu piel mojada, para que nunca más sientas miedo.
Gracias, mi amor. Ya sabes que espero hasta el último momento para salir corriendo a orinar. Escribe tu post. Probablemente, lloraremos juntos, pero también venceremos nuestros traumas.
Gracias por estar en mi vida. Un abrazo.
Hola amiga, que terrible experiencia, eso demuestra como los adultos amenazan a los niños para que no digan la verdad, creo que si hubieses dicho lo que pasó tal vez la historia seria otra.
Todavía no te gustan las vacaciones? Bueno eso hay que arreglarlo, hay que soltar ese temor, además ya no mojas la cama o si?
Saludos amiga, te deseo mucho éxito.
Jajaja. No mojo la cama, pero la verdad es que no me gusta salir de casa. Me imagino que con otra terapia narrativa como esta, podría despertarse en mí el deseo de viajar.
Gracias por pasar y dejarme este cálido comentario. Un abrazo.
You rarely write for us - maybe you don't remember: please always attach your own English version to texts in your native language!
Thank you ;-))
Gracias por el recordatorio. Ya traduzco.
Thank you so much for giving us a wonderful chapter from your childhood. I am sure you must be passing through a horrific time until your sister arrived to take you back. I believe the elders should understand that bedwetting is a medical problem and not a child's willingness to avoid going to the toilet.
Sí, los adultos nos creemos sabios, y damos sentencias, cual jueces implacables.
Gracias por este concurso Me hizo bien reencontrarme conmigo misma. Un abrazo.
TEAM 2
Congratulations! This post has been voted through steemcurator05. We support quality posts, good comments anywhere and any tags.Mil gracias por el apoyo, @dove11. Me siento honrada de recibirlo. Bendiciones para ti.
Saludos amiga sol leí tu conmovedora historia y me identifico con ella porque al igual que tú sufrí ese mismo problema y no entendía porque sufría ese problema hasta ahora de adulto que el especialista me dijo que tenía doble conducto excretor en mis riñones y por eso orinaba tanto, pero de niño es difícil controlar esto de no mojar la cama
Por otro lado cuando hay adultos así como la señora concha nos da mucho terror decir la verdad por temor a ser castigados
Mi diagnóstico es que tengo una "vejiga" pequeña. Basta con tomarme un vaso de agua para sentir necesidad de ir a orinar. De hecho, aún me despierto entre dos y tres veces en la noche para orinar. Pero, a veces, nos creemos dueños de la verdad, cuando habla la ignorancia.
Gracias por pasar y por dejarme este cálido mensaje. Un abrazo.
Puede haber varias razones, pero ¿has probado Cantharis D6?