Alabanza al trabajo.

Celebramos este día
que es el primero de mayo
el cual tiene de objetivo
es la alabanza al trabajo
que se realiza en el mundo
y para el provecho humano.

En tiempos de la creación
de nuestro Dios tan amado
empezaron las labores
en su natural estado,
y han venido en pleno ascenso
en nuestro historial logrado.

Hoy celebramos un día
que nos hace muy ufanos
y abarca a todos en una
porque trabajo es trabajo,
y se ha de felicitar
al obrero dedicado
a labores de la vida
donde es factible su mano
porque pareciera humilde
lo que está desempeñando,
pero sin su intervención
nada tendría resultado.

Viva el obrero del mundo,
el carpintero, el soldado,
el albañil, el doctor,
el médico, el abogado,
que vivan los profesores
-guías para el bien sagrado-,
que viva el agricultor
que con su semilla ha dado
construcciones gigantescas
que han de hacerlo estar ufano.

Que vivan los enfermeros
que siempre están ahí actuando
en bien de la humanidad
y hasta viven arriesgando
la vida en operativos
que ameritan de cuidado.

Que vivan los vigilantes
que también han aportado
su labor por continuar
en actitud progresando,
vivan los profesionales
también universitarios,
los chóferes, vendedores
y comerciantes que horarios
no tienen para cumplir
su compromiso sagrado.

Que vivan los policías
que se viven esforzando
por el bien de los demás
y merecen ser premiados
con valiosas distinciones
y con muy dignos salarios.

De todo existe en la villa
de nuestro Señor amado,
y en esa frase elocuente
también queda demostrado
que el trabajo es don hermoso
que el Señor nos ha legado.

Muchos trabajos existen
y en pleno deber estamos
de cumplir las exigencias
para que eficientes seamos,
por eso yo felicito
a quien estima al trabajo
como fuente de su vida
y de sustento alcanzado,
por eso llegan a tiempo
para cumplir el horario
y a veces no ven la hora
de darlo por terminado,
y los hombres y mujeres
en él se hallan enmarcados.

Felicitación a todos
y que mi Señor amado
les dé existencia y salud
para continuar bregando
con ahínco y con denuedo.
¡¡¡Vivan los trabajadores,
que viva el día del trabajo!