Saludos amigos de Comunidad Latina

Entre mis recuerdos anecdóticos, que tuve que presenciar y que aún me da risa cuando viene a mi mente por alguna circunstancia, sucedió hace más de 4 años, cuando trabajaba como jefa del servicio de farmacia del hospital de Cumaná y que por cuestiones de la distancia desde mi casa al hospital, decidí dejarle mis llaves a una compañera de trabajo que en la actualidad como una hermana más.

Bueno resulta, que un día, mi compañera llegó temprano como todos los días y al parecer se le presentó unos cólicos que la hicieron ir al baño y que por mala suerte no habia agua en esos momentos, porque lamentablemente nuestro hospital tiene problemas severos con el servicio de agua y solo disponemos de dicho servicios por hora. Donde la jovencita tenía una indigestión, pero como estaba sola, no habia problema mientras ella solucionaba, pero ese dia llegue antes de la hora acostumbrada y cuando fui a entrar a la oficina eso olía a burro muerto, ja.ja.ja. Cuando ella me vio, se puso de todos colores de lo avergonzada que estaba, por lo que, me sume a ayudarla a buscar agua en otras áreas del hospital y evitando de todas formas que alguien más accediera a la oficina con la excusa que habiamos conseguido una rata muerta y eso estaba fétido y que entrarían allí, luego de la limpieza y así fue.

Como yo soy muy bromista, ella me pidió que por favor no le contara a nadie lo sucedido y de verdad que no lo hice, pero pase todo el dia riéndome que me decían que si estaba loca.

Claro que he errado, y casualmente quien de dio cuenta del error, fue la misma joven de la que le conté la anécdota. Mensualmente, me correspondía pasar a administración la solicitud de medicamentos para su posterior compra en base a las fallas que tuvieramos, ese mes casualmente y de verdad no me explico, omiti tres renglones que son indispensables para el funcionamiento de la emergencia del hospital. Entregue mi oficio y salí del hospital.

Cuando llegue a mi casa, que empiezo a verificar lo que solicite, me percaté de mi error e inmediatamente llame a la joven y le explique lo que pasó. Ella para ayudarme, me pidio que lo volviera hacer, para que se lo pasara via email y poder imprimirlo a primera hora, para retirar el que habia entregado diciendo que yo habia entregado una solicitud errada dejando la solicitud válida en mi escritorio y que por la rapidez con que sali tome el oficio equivocado, es decir, que me salvó de mi error.

Esas personas en las que se puedan confiar, son un tesoro invaluable para cualquier jefe, porque además de ser discretas demuestran su fidelidad a sus compañeros de trabajo, evitando de todas formas que se denigre a su equipo de trabajo.

La fotografía es de mi propiedad tomada con mi cámara Cassio. Invito a @ karleidys, @zairajfm y @oriongg a participar en este hermoso concurso mediante su: