Ahora mismo estoy sentada frente a la computadora y me puse a escuchar una música que es muy hermosa y aunque estoy indagando en mi mente un tema para desarrollar, por algún motivo no surge ninguno, sino que parece que cuando alguno intenta emerger apenas lo miro se esconde y se sumerge otra vez en las aguas profundas de la inconsciencia…

¿Qué debería hacer en este caso? Tal vez irme a descansar, a dormir. Algo que me gusta hacer en estos casos es ponerme a editar fotografías, o cualquier otra cosa que me guste.

Hay quienes hablan del bloqueo del escritor y esto se refiere a cuando estas frente a una página en blanco y no puedes desarrollar ninguna idea, o no aparece nada lo suficientemente interesante para darle forma y vida, eso es más común de lo que se cree.

En mi caso creo que ese bloqueo como tal puede reflejar algún cansancio o agotamiento en las ideas, a veces es solamente una falta de orientación acerca de qué es lo que está despertando mi interés en esos instantes, entonces sería necesario dirigir la brújula hacia ese camino.

Creo que para superar los bloqueos solo es necesario ver hacia donde apuntan nuestros intereses e indagar allí.

Se suele sugerir mucho, leer, pero a veces es justo lo contrario lo que necesitamos, despejar la mente de ideas, instrucciones y recetas, para dejar que afloren las nuestras. Por eso el silencio y la observación son tan importantes, para sentir y observar, digerir todo aquello que de alguna forma llevamos dentro.

Para poder escribir se necesita experimentar lo que se siente, lo que se vive en cada instante en el momento presente. Si no estamos presentes totalmente, ¿cómo podemos vivir a plenitud las experiencias, disfrutarlas, para luego finalmente compartirlas a través de unas letras que pueden tomar diversas formas?

Todo se va resumiendo en vivir el instante de verdad, con toda la atención, como el momento único e irrepetible que es.

En ocasiones solo nos damos cuenta de esto en las situaciones límite, durante los dolores y las pérdidas es que aprendemos a apreciar los momentos, es cuando empezamos a luchar para tratar de recordar, aquel detalle que se nos dijo, aquel toque, o aquel beso. La primera sonrisa del niño, el bebé arrullado en los brazos…

La vida, por la cotidianidad y la rutina, nos hace perdernos de los detalles, y son esos detalles los que van marcando nuestra vida.

Sacar lo que está dentro, ¿cómo lo haces si no sabes qué hay? Solo es preciso detenerse y escuchar el susurro del corazón.

Escribir es quizá, una de las pocas cosas que nos hace humanos, la capacidad de plasmar en unas letras experiencias, pensamientos, sentimientos, emociones que quedan allí a través del tiempo.

¿Entonces? ¿Es posible un bloqueo? Tal vez solo es necesario descansar, recostarse un rato y mirar, cerrar los ojos y escuchar… tan solo sentir el palpitar del mundo alrededor.

Muchas gracias por leer y comentar.

^{Las fotos son de mi autoría las tome con un teléfono Samsung SM-A105M, editadas en Ligthroom}

@inspiracion