El invierno está llegando

En el hemisferio sur avanzado el mes de mayo vamos transitando el otoño en pleno y estamos prácticamente a un mes del comienzo del invierno.

La estación previa a la más fría del año se nota en el clima pero también en la vegetación, según mi criterio el otoño es la estación más colorida de las cuatro, quizás no sea exacto decir que es la que más colores posee sino la que más contrastes remarca, esto se debe principalmente a que las hojas de los árboles toman distintas tonalidades que dependiendo del lugar se pueden convertir en una sinfonía de colores y contrastes, en la Patagonia por ejemplo esto es hermoso e indescriptible, una característica única que no he visto en otras partes.

Aquí en Buenos Aires predominan los colores ocres y anaranjados y las veredas y calles se tapizan de hojas secas que caen de los árboles sin solución de continuidad, es el símbolo más reconocido, el distintivo de esta estación.

Para la mayoría de la gente hay marcadas preferencias por alguna de las cuatro estaciones del año, yo no puedo decidirme y a mis 64 años creo que es tarde para inclinar la balanza por alguna de ellas; todas las estaciones tienen sus particulares detalles distintivos, algunos buenos y otros quizás no tanto, a veces pienso que la primavera con su clima moderado sus flores, sus pájaros y por supuesto el amor que flota en el aire es la mejor pero luego viene un buen verano donde se disfruta de las vacaciones, del aire libre, la playa y las noches templadas, entonces creo que ahora sí encontré mi estación preferida; posteriormente regresa el otoño con sus colores y su romanticismo y vuelvo a dudar, finalmente el invierno, más frío y quizás melancólico pero si me encuentra con una buena estufa de leños y con una copa de coñac en la mano todas mis convicciones anteriores se caen como castillos de naipes.

Definitivamente mis estaciones favoritas son todas, cada una con sus características y particularidades; lo importante es vivirlas y disfrutarlas, con los seres amados, con amigos o porque no, también en soledad. Todas de alguna manera nos hacen sentir que estamos vivos, que tenemos una misión en este mundo, todo nos invita a continuar hacia adelante en busca de un gran futuro para nosotros pero también para nuestro prójimo y nuestra descendencia.

La fotografía es de mi propiedad.
Héctor Gugliermo

@hosgug