El lanzador Venezolano Félix Hernández fue un pelotero fuera de serie, desde sus comienzos por allá en la temporada de 2006 ya estaba dando síntomas de lo que era capaz de hacer, y pues todo lo que se hablaba de el quedaría plasmado en el terreno de juego, su lugar favorito terminaría siendo el montículo, donde cosechó varios triunfos, victorias que quizás no ayudaron a su equipo a llegar a la post-temporada, pero a nivel individual resaltó ante el resto de los lanzadores de la Liga Americana de esa época, tanto así, que llego a hacer lo que todo pitcher abridor soñaría hacer en su estadía en las grandes ligas, que es ganar un premio Cy Young premio que se da al mejor lanzador de una temporada, y concretar un juego perfecto, hazañas que ocurrirían en las temporadas de 2010 y 2012 respectivamente, quizás el mejor momento de su carrera profesional, o su punto mas alto, donde su dominio era tal, que esa fue la época que lo catapultó a luego cosechar mas de 2500 bateadores retirados por la vía del ponche.

Su dominio desde el montículo fue de una manera tan impresionante que llevo al juego y a las estadísticas a otro nivel de aceptación, es decir, que a pesar de que sus triunfos en la mayoría de los casos no llegaban a concretar por falta de respaldo ofensivo de sus compañeros de equipo, su actuación cada vez que le tocaba el turno en la rotación eran demasiado buenas, llevándolo a ganar el premio al mejor lanzador de la Liga Americana con un récord de ganados y perdidos muy poco visto, 13 ganados y 12 perdidos, generando toda una controversia en esos tiempos, pues habían lanzadores con 18 y 20 triunfos, que no fueron tomados en cuenta para dicho premio, pero las estadísticas mas importantes para un lanzador, las dominaba Félix de una manera muy clara, que eran la efectividad que siempre fue por debajo de 3, las entradas lanzadas que casi siempre superaban las 200, y los abanicados, que por lo general también superaban los 200 por temporada, números que no se podían ocultar, dándole por fin la aceptación y el premio con evidencias muy contundentes.