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La Maleta

Ayer cuando guardaba tus cosas en esa vieja maleta, recordaba cada momento que pasamos juntos, el balón de fútbol que te regalé en tu cumpleaños rodeado de familiares y amigos, ese ojo morado al llegar de clases, tu madre horrorizada pensando en demandar a toda la escuela, cuando sonreíste con tu primer amor que también te enseño la decepción, ese corazón roto que con esfuerzo ayudamos a remendar, tus logros académicos que nos llenaron de tanto orgullo, ¡En fín! Algún día serás un hombre de leyes, abogado como tu madre, aunque esta nunca llego a demandar a la escuela.

La vida es un viaje, te decía: puede ser corto o largo, eso no depende de nosotros, cómo todo pasajero ya tenemos un itinerario definido por un ser superior, del cual tampoco tenemos ningún tipo de control, como barca a merced del viento muchas veces hay que dejarse llevar por nuestros instintos, por esa fuerza misteriosa que nos mueve, nos arrastra, nos inspira. Quizá tu felicidad no está en el país, puede que te sonría afuera o por lo menos te guiñe un ojo, aunque desde el fondo de mi corazón no quería que te fueses, así tan rápido, sin anestesia, como dicen Uds. los jóvenes. Recordé una lectura donde decía lo siguiente: "Los hijos son prestados, nunca nos pertenecieron, sólo los disfrutamos por un tiempo, al igual que ellos a nosotros".

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Respirando profundamente, te dije: No todo es lo que parece, algunas de las más hermosas canciones fueron escritas a raíz de las más fuertes decepciones, te esperarán duros retos, ser extranjero como lo fuí yo alguna vez, no es cosa de juegos, tendrás que adaptarte a otra cultura, otras normas, otra gente.

Lo que realmente vale es lo vívido, cada experiencia nutre, te alimenta y expande tus horizontes, las expectativas que tengas deséchalas ya que serán parte del entorno, solo respira cada segundo, disfruta del camino, la vida se basa en eso, ¿No lo crees? Será lo más parecido a una montaña rusa te lo aseguro, los obstáculos son parte del paisaje y depende de ti como los asimiles, sólo nosotros podemos convertirlos en oportunidades y, si te va mal, no creas que tu mundo está perdido, cada persona que llega a tu vida es una lección: Unos llegan, se quedan, se van y otros simplemente te saludan, creen que te conocen, pero nunca te han visto llorar, sólo tienen esa pequeña percepción, esa ínfima parte de ti, nunca te verán con mis ojos.

Te dí las herramientas necesarias para defenderte en la vida, aunque uno nunca desea terminar el trabajo, no nos queremos dar cuenta que ya han crecido y es hora de dejar el nido. ¡Ve hijo mío! Crece, evoluciona, siembra semillas en otras tierras, conserva la esencia de lo que somos, los valores, esas pequeñas cosas que te hemos enseñado, desde lo más humilde de nuestro ser, recuerda que jamás volverán a llamarte por tu nombre, donde te encuentres lleva con orgullo el tricolor y las estrellas de nuestra hermosa nación. No te vayas amado hijo, no sin antes darte mi ¡Bendición!

Este Post es de mi autoría @elmagodeozcar
Espero que el contenido del mismo sea de su agrado
Gracias por su Visita!!!