La importancia del consentimiento

Hoy escribiré sobre un tema que me parece extremadamente importante hoy en día, cuando hay tantas víctimas de violación (por supuesto, principalmente me refiero a casos de violencia de género en los cuales las víctimas son mujeres) pero también se aplica en mujeres hacia hombres. Nadie está exento de ser víctima de violación; sin embargo, las estadísticas siempre nos hablan del alarmante número de mujeres que sufren bajo una sociedad que insiste en normalizar la violencia y la dominación del sexo masculino sobre el femenino.

En el ámbito sexual, el consentimiento es uno de los elementos más importantes para que el acto se pueda llevar a cabo con la autorización de ambas (o más) partes.

El consentimiento no sólo se da de forma verbal. También depende de la actitud y el lenguaje corporal. Si una persona responde que "sí" quiere tener relaciones sexuales pero está siendo coaccionada o presionada de cualquier forma, sintiéndose obligada a actuar en contra de su voluntad, y el acto sexual continúa, se considera como una violación por parte de la otra persona.

Para comprender esto a plenitud, debemos entender que una violación se traduce en la aproximación sexual de una persona a otra sin su consentimiento. Ya sea: abusar de una persona mientras está inconsciente, en estado de ebriedad o bajo efectos de drogas; forzar a alguien a tener relaciones sexuales a pesar de que verbalmente se negó, perpetuar el acto a pesar de que la persona se encuentra visiblemente incómoda o indispuesta; si la persona obliga a otra mediante amenazas y distintas formas de coacción, si la persona manipula a la otra a nivel físico, psicológico o emocional para tener relaciones sexuales; no utilizar preservativos cuando una de las partes lo exige para mantener relaciones. Todo esto es considerado violación.

También es muy importante tomar en cuenta que los violadores no son únicamente personas ajenas a la víctima, o aquellos que no tienen una relación amorosa con ella. Las parejas también pueden cometer acto de violación; ser esposo/a o novio/a de alguien no significa que esa persona siempre esté disponible sexualmente o siempre quiera tener relaciones. Si un hombre obliga a su esposa a tener sexo o la presiona para tenerlo a pesar de que ella ha manifestado que no lo desea, igualmente está cometiendo violación.

Muchas personas leerán esto y pensarán que todo lo que he explicado es de sentido común (y lo es). No obstante, por desgracia he visto muchísimas noticias sobre estos casos, y en todas he leído comentarios en los cuales la mayoría de las personas claramente son ignorantes respecto al tema y no tienen noción sobre qué es el consentimiento ni el abuso sexual.

Otro punto relevante (y lo menciono porque es algo que suele destacar en los comentarios que leo) es saber que NADA justifica una violación. Absolutamente nada. Excusas como "Ella iba vestida con ropa provocadora", "iba muy maquillada", "iba sola", "estaba caminando de noche por una zona peligrosa", "ella accedió a tomar con esos hombres", "ella accedió a visitar su apartamento", y un largo etcétera, no justifican en absoluto que una persona viole a otra.

Como sociedad estamos acostumbrados a que se enseñe a la mujer cómo protegerse de los violadores, pero no se le enseña a los hombres a no violar.

Respetemos el espacio del otro, el cuerpo del otro. Dejemos de usar excusas como "el instinto animal" y dejemos de normalizar la violencia y la dominación del hombre sobre la mujer. También dejemos de reírnos cuando un hombre denuncie que es víctima de abuso sexual o violencia doméstica. Dejemos de replicar los preceptos que nos ha enseñado el machismo durante tantas generaciones.

Escuchemos y veamos con atención. Si tenemos una pareja, prestemos mucha atención a su actitud al momento de tener relaciones sexuales. No presionemos, preguntemos siempre si se siente cómoda. Si notamos que algo no está bien, paremos un momento y asegurémonos de que nuestra pareja esté bien. No existe mayor placer que estar con alguien que desea estar con nosotros y se halla en toda plenitud para disfrutar del acto sexual.

Si han sido víctimas de abuso sexual, por favor, denuncien. Nunca callen, luchen por sus derechos, pues podrán ayudar a muchas personas que han pasado por la misma situación que ustedes. Busquen ayuda y crean en las personas que las aman y las ayudarán a levantarse y a ser capaces de disfrutar nuevamente de la vida, a pesar de todo el daño, a pesar de la crueldad de la sociedad y el sistema judicial corrupto. Pero las personas que luchamos somos más, y juntos prevaleceremos.