Lugares mágicos / “Un Hacker Espacial”

Estando de visita en el Domo de Maloka, observando el espacio proyectando en 3D, analice la carrera espacial, que la curiosidad del ser humano ha llevado a cabo; es maravilloso pensar que podríamos volar, salir de la seguridad de la tierra. Y debido a la frase de Peter Drucker, que resaltan al nombrar a un hacker argentino de la tecnología; inicie esta mágica investigación que a continuación compartiré, Confió nos acompañen….

Resaltaron el nombre de Emiliano Kargieman; quién lo tildaron de loco y hacker a la vez. Lo curioso a mi entender es lo que está realizando con sus conocimientos, astucia y emprendimiento, en relación con los nanosatélites; proyectos menos ostentosos, que otros como los de Elon Musk de establecer una colonia en Marte, o de Branson con el turismo espacial. Después de asistir a Singularity University, a un encuentro de innovadores en Silicon Valley ; tomó la decisión de revolucionar la industria satelital a nivel mundial.

Kargieman está realizando un proyecto para democratizar el espacio, produciendo nano satélites, más económicos para competir con los grandes satélites, que actualmente sólo pueden ser costeados por las grandes multinacionales y los gobiernos interesados en la carrera espacial. Los satélites que se utilizan para observar la tierra, vigilar fronteras , detectar incendios forestales, observar huracanes; son muy costosos y pueden tomar una fotografía cada día.

La idea de Kargieman es crear una plataforma de 15 nanosatélites, de modo que puedan tomar fotos a toda la tierra cada 15 minutos. La idea de Charlotte Dematons en su libro “El globo amarillo” quién se escapa y emprende un viaje a través del mundo; no estaba loca ni descabellada; pues para este emprendedor argentino es toda posible; aquí se juntan los soñadores; una que escribe fantasías transportadoras con sus relatos, y otro que apuesta a la realidad con los nano satélites en órbita.

De todas maneras, si se siguen necesitando los cohetes impulsores, como observamos en la imagen, esta gigantesca turbina de propulsión. A lo que apuesta el argentino es a bajar costos y a la reutilización de estas naves. La inspiración surge de la evolución de las computadoras; luego de recorrer en Silicon Valley, la cuna de la tecnología. En palabras de Kargieman: “hay que recorrer, destapar lo creado y analizar las etapas de evolución, para creer que puede evolucionar.

La idea básica y social, es acercar aún más la tecnología y sus variadas aplicaciones, que surgen cada día, y lograr acercar el internet a costos más asequibles a las poblaciones más vulnerables. Es lógico que quizás tenga una vida útil más corta, pero los costos de producción son cientos de veces más bajos, reemplazandolos periódicamente, siguen siendo más económicos y útiles pues el peso de los nano satélites es de 2 kilos; ya han sido lanzados de manera experimental.

Este emprendedor argentino que estudió matemáticas y filosofía; afirma que la industria aeroespacial a diferencias de la computación ha ido a pasos lentos. Ambas industrias empezaron siendo desarrolladas por las fuerzas armadas. En su visita en 2010 al centro espacial de la Nasa, le llamó la atención el atraso tecnológico; debido a los fondos de inversión y la inercia de la burocracia, que es quién aprueba y arrienda al sector privado. De ahí la sensibilidad de este aventurero -emprendedor.

El objetivo del primer nano satélite -El capitán Beto- fue aprender a hacer nanosatélites y tratar de construir tecnología espacial; al igual que el segundo- Manolito- claro tomando los mismos riesgos, que toma un satélite tradicional; pero los -nanos satélites -los están integrando con costos muchas veces más bajos. Al saber de tecnología de computación, puesto que es el CEO de Satellogic, la empresa que desarrolla esta innovadora tecnología espacial.

Se le llama Hacker debido a que se inició como desbaratador de teléfonos, para saber cómo funcionaban; también desbarató computadoras con el mismo propósito. A sus 19 años, con un grupo de tres amigos llegaron a trabajar para el gobierno argentino, en la dirección general impositiva; para que experimentaran cuán seguros eran los sistemas de cómputo de la agencia de impuestos estatales. Luego fundaría su propia firma con algunos de sus amigos: “Core Security Technologies”

Este innovador ha contado con el apoyo del gobierno argentino, que tiene su propia carrera espacial; sin embargo, apostó por Satellogic, con un financiamiento de 1.600 millones de dólares; pero manteniéndola como una empresa privada. Y Controlada por Emiliano Kargieman, apodado el- hacker espacial- El progreso continua para bien de la ciencia y la educación, y para todo aquel que se acerque a la tecnología. Hoy existen más aventureros, enviando nanosatélites al espacio; pero el argentino tomó la delantera.