Nuestro planeta tierra, el lugar donde vivimos, con sus hermosos paisajes, ríos, llanuras, enormes y pequeños animales, que nos impresionan cada día, son parte de ambiente. La fauna, con su ritmo de vida, crece, se desarrolla y a través del Don de reproducirse de nuevo y dar una nueva vida en el reino animal.

La diversidad animal es amplia cuando nos referimos como tal, ya que observamos que existen animales inmensos, pero que son necesarios en el proceso de vida.

Esta diversidad animal tanto terrestre, acuáticos y aves, impresionan al señor humano, ya que los animales domésticos que podemos tener en nuestras casas, como es el loro, perro, pato, gallo y gallina, viviendo junto a nosotros, demuestran tener sentido de captar lo que decimos. Nos acompañan a cualquier lado, donde podemos criar animales, los cuales pueden ser aprovechados para comer más adelante (así uno no quiera, hay que hacerlo).

Asimismo, esto no queda aquí, ya que ellos son capaces de reproducirse, querer y criar a sus crías con cuidado, que sólo el animal sabe como alimentarlo. Son tan tiernos sus crías cuando nacen.

Somos dichosos las personas de observar, convivir y ser parte de la vida animal, porque en algunos casos, solamente piensan que son animales nada más y no debería de ser así. El disfrute de tú animal y tenerlo como parte de tu familia, para ellos es importante ese lugar que le das.

Hoy en día observamos el abandono de los animales, el descuido sin protección alguna. Cuando nace una nueva cría, nace una nueva vida más, que necesitara protección y bienestar.

Con los animales en extinción, las personas se preocupan, es decir, los que sienten cariño hacia los animales, ya que los animales son casados para acabar con su raza o venderlos.

Miramos la tranquilidad de los animales domésticos, ya que podemos acercarnos a ellos, dando un hogar y alimentación. De nosotros depende su reproducción.