6 Cosas que debes dejar de preocuparte ya
Te acuerdas de la última vez que te preocupaste por asuntos donde tú no tenías el control o inclusive cuando tú lo tienes.
Eso solía pasarme durante muchos años, especialmente cuando pensaba en cómo pagar mis deudas.
El preocuparte demasiado a veces te pone en posiciones de oscuridad y situaciones en la que no puedes escapar. Sin embargo tú eres la persona que se encarga de retener esos pensamientos o dejarlos ir.
Durante una década he encontrado diferentes hábitos que me han ayudado a dejar atrás esas preocupaciones o por lo menos disminuirlas y lo más importante manejar mis pensamientos cuando eventos inesperados aparecen.
No sé si este tipo de cosas te ha pasado, sin embargo hoy he decido compartir con ustedes las 6 cosas por el cual he dejado de preocuparme:
1. Dinero
Esta es una de las mayores preocupaciones que siempre tenía hace años. A veces me preocupaba tanto de cómo iba a pagar mis deudas que no podía dormir por la noche y ese fue un gran problema. Con el tiempo me di cuenta que entre más te preocupas por el dinero, menos aparece en tu vida.
Una de las cosas que me ayudo en este proceso fue cuando leí el libro Padre rico, padre pobre de Robert Kiyosaki. En ese momento me di cuenta, que si quería más dinero, tenía que trabajar por ello y no esperar que me cayera del cielo, esto me ayudo a vender más, habilidad que antes no tenía.
Desde que deje de preocuparme por mis finanzas, he tenido mayor abundancia. TrueStory!
2. El miedo a fracasar
Qué tal si fracaso en mi nuevo proyecto, que tal si no consigo clientes, que tal si no le gusta a mi novio el nuevo peinado que tengo, que tal, que tal y que tal……. Seguir pensando en lo que no pasara en tu vida, tiene grande consecuencias, porque así tu vibra lo ha querido.
El mayor problema que puedes tener cuando tienes miedo a fracasar es que no tienes claridad sobre lo que deseas lograr. Toma unos minutos a solas para aclarar tus pensamientos y encontrar la claridad que necesitas, veras que después te ahorraras tiempo, energía y hasta sufrimiento.
3. Deje de pensar en lo que pensaban los demás de mí
Una de las preocupaciones más tontas que podemos tener en la vida, es tratar de encajar en el mundo de otros y con eso vienen las preocupaciones sobre el que dirán de nosotros. Yo vivía preocupada en la forma como vestía cuando salía con mis amigas, como me comportaba o inclusive cuando trataba de buscar aceptación en un grupo determinado.
Ahora que tengo más años, me repito a mí misma “que tonterías pensaba yo durante esa época”. Ninguna de esas preocupaciones me llevo al lugar en donde estoy ahora, mucho menos pagaba mis facturas. Así que decidí vivir mi vida libre como una paloma y desde ese entonces soy una mujer feliz.
4. Deje preocuparme en el pasado
El pasado es lo que vivimos y eso se queda ahí, no hay modo de cambiarlo a menos que tengas una máquina del tiempo como el de la película: Back to the Future. Recuerda que cuando pasas mucho tiempo pensando en el pasado, no tendrás tiempo para vivir el presente ni pensar en el futuro.
Si tuviste una experiencia muy mala, ya sea con algún colega, pareja o familia, un buen consejo que te puedo dar es pasar un tiempo a solas en el mar. Por alguna razón pienso que el mar se lleva lo malo y te limpia tu aura.
5. Deje de preocuparme por vestir a la moda
Cuando estaba en la década de los 20, básicamente vivía en las tiendas comprando lo que estaba a la moda y con eso gastaba grandes cantidades de dinero. Se imaginan cuánto dinero yo hubiera ahorrado o invertido con lo que gaste durante esa década Jajaja. El tiempo me dio la razón y hoy en día solo compro cosas básicas que pueda utilizar por años, porque vestirse a la moda es bonito, pero también es pasajero y es muy posible que no lo puedas utilizar después.
6. Deje de preocuparme por lo que decía mi familia de mi
Durante la época en la que crecieron mis padres, las cosas eran muy distintas y se vivía con ciertas limitaciones. Por ejemplo no se podía vivir con la pareja porque se veía mal o por ejemplo si estabas casada y no tenías hijos aun, también se veía mal. Sin embargo una de las cosas que más molestaba era cuando mi familia me preguntaba que iba hacer con mi vida, que si tenía que estudiar una carrera en la universidad, que si tenía que tener un buen trabajo, que si tenía que casarme y ya sabrán ustedes todas esas cosas que nos dicen nuestras familias.
En el momento que deje de preocuparme sobre lo que ellos decían de mi, todo cambio. Ya no me preocupa nada, porque yo soy el capitán de mi barco y yo se hacia dónde me dirijo, nadie más.
Ahora con esto no digo que ellos no tienen cierta razón con lo que dicen, sin embargo cada uno tiene que vivir su vida.
El dejar de preocuparse es uno de los mejores hábitos que podemos adoptar. Preocuparse es sinónimo de ansiedad y con el tiempo esto podrá dominar tu vida. Espero este articulo haya sido de gran ayuda y nos vemos en mi próximo post.